Si se puede decir que Leo Messi llegó a desaparecer en algún momento, desde luego esta temporada el argentino ha demostrado que está de vuelta más fuerte que nunca.
Después de algunas temporadas cuestionado, con Cristiano Ronaldo llevándose los galardones individuales e incluso con rumores sobre su continuidad en el FC Barcelona, el astro culé se ha echado a su equipo a la espalda y se ha convertido en pieza clave del conjunto de Valverde.
Messi lleva a estas alturas de temporada 20 goles y 12 asistencias. Con estos números el astro argentino cerró la primera vuelta de la temporada como pichichi de LaLiga Santander con 17 tantos, revalidando así lo conseguido en la anterior temporada donde cerró la primera vuelta con 15 goles, acompañado por Luis Suárez.
Y es que el argentino ha sabido controlarse muy bien y dejar que el Txingurri Valverde administre bien sus minutos. Con el objetivo de llegar al final de la temporada en las mejores condiciones posibles, Messi ha aprendido a descansar de cuando en cuando y quedan olvidadas las estampas de temporadas pasadas donde, cada vez que se sentaba en el banquillo, sobraban los análisis de sus malos gestos.
Pero Leo también ha demostrado esta temporada que sabe dosificarse sobre el terreno de juego y desgastarse lo justo y necesario. El argentino parece estar siempre en el lugar adecuado y no correr más de lo preciso.
Aparte queda lo obvio: su calidad indiscutible, su zurda de oro, sus regates interminables o una visión del juego que solo él alcanza a comprender. Así Messi ha conseguido arrebatarle a Neymar el trono de jugador con más regates completados, cerrando la ida de la temporada con 101.
Sin duda algo que ha influido en la excelente temporada de Messi es reencontrarse con el mejor Suárez. Pese a un discreto inicio de temporada, el uruguayo vuelve a estar a su mejor nivel y ambos son un auténtico quebradero de cabeza para las defensas rivales. De hecho, después el último partido contra el Girona, la dupla del Barça ha recortado distancias para la Bota de Oro.
Con una Liga muy de cara, el Barcelona tiene entre ceja y ceja el triplete para cerrar una temporada de lujo. Por su parte Messi buscará volver a hacerse, al menos oficialmente, con el trono del fútbol mundial y llevarse su sexto Balón de Oro.
Para la mayoría de aficionados al futbol, Messi se ha convertido en el mejor jugador de la historia de este deporte. No solo por su juego espectacular, sino más bien por la continuidad que rosarino muestra durante tantos y tantos años a un nivel excelso. Disfrutemos de Messi todo lo que podamos, pasará mucho tiempo hasta que vuelva a aparecer un genio en el futbol con este calado en el juego.
