Otro «Gorragate» en la bonaerense: juzgan a efectivos de comisaria de Quilmes

Otra vez miembros de una dependencia policial de la región están sentados en el banquillo de los acusados, bajo una delicada imputación como la «extorsión», a los exuniformados se les endilga haberle solicitado 15 mil pesos a un joven que fue detenido en un procedimiento donde le secuestraron la moto a cambio de no «armarle» una causa por portación de arma de fuego.
Todo se dio el 10 de agosto de 2012 cuando en un operativo en la zona oeste del distrito el denunciante fue detenido y se detectó en la moto que conducía algún tipo de irregularidad, que una vez llevado a la dependencia de la Avenida 12 de Octubre, tal consta en la causa los imputados Jorge Maderna, que era el jefe de calle de la dependencia, Diego Bueno; Alberto Oliva y Oscar Fernández le solicitaron 15 mil pesos a cambio de no procesarlo en una causa judicial.

Que en esa situación un familiar de la víctima abonó 4 mil pesos que permitieron al joven recuperar la libertad para luego llevar adelante la denuncia en Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad que de inmediato procedió a poner en disponibilidad a los mencionados. Ahora afrontan los cargos donde son acusados por la fiscal María Adela Isabel Oricchio y defendidos por los letrados particulares, Luis Giordano, Marcelo Arias y la defensora oficial, Silvia González.

Según se conoció, el hecho ocurrió durante un operativo policial en el que el jefe de calle Maderna detuvo a un motociclista que, al parecer, tenía irregularidades en su documentación, por lo que el uniformado le habría «solicitado dinero para obviar la falta» y dejarlo ir sin tomar las medidas pertinentes.

Luego de esta situación, el vecino motociclista se habría dirigido a la Oficina de Denuncias del Departamento Judicial de Quilmes para dejar asentada su denuncia, motivo por el que la Justicia con los elementos colectados en la instrucción ordenó la aprehensión del funcionario policial; igual suerte corrieron durante la causa los otros encartados.
Los jueces Alejandro Portunato, Alicia Anache y Edgardo Salatino seguirán adelante en las próximas horas con los relatos de los testigos convocados en los hechos acaecidos hace casi siete años.