En una madrugada teñida de violencia, el barrio La Rotonda en Florencio Varela se vio sacudido por un ataque armado al sereno del frigorífico La Huella. A las 02:30 horas, desconocidos ingresaron al establecimiento y dispararon un balazo directo al tórax del sereno, dejándolo en estado crítico. Rápidamente, el SAME respondió al llamado de emergencia y trasladado a la víctima al hospital Mi Pueblo, donde se debate entre la vida y la muerte en estado reservado.
Las primeras investigaciones de las fuentes policiales apuntan a un acto premeditado, aunque las motivaciones exactas aún son difusas. Sin embargo, tras las elecciones del domingo, un rumor inquietante empezó a circular, señalando incidentes en el frigorífico La Huella, una planta que arrastra años de conflictos patronales, manifestados en disputas interminables entre los empleados.
La Huella de la violencia
Ricardo Bruzzese, al mando de tres plantas, incluida la de Florencio Varela, junto a otras ubicadas en Arenales y Penta en Quilmes, se encuentra inmerso en una compleja trama de tensiones laborales. La planta de Florencio Varela, en particular, ha sido escenario de conflictos sostenidos, manteniendo a los empleados en un estado de constante agitación.
Rubén Gargiulo, el supuesto propietario real de La Huella, ha venido denunciando sistemáticamente las acciones de Bruzzese, alegando ocupación ilegal de la planta en Varela y otros actos irregulares. La lucha por el control de la empresa ha generado un caldo de cultivo tenso y volátil, donde los trabajadores se ven atrapados en medio de las disputas de poder entre los dos empresarios.
La balacera en el frigorífico La Huella no solo marca un episodio de violencia extrema, sino que también arroja luz sobre la necesidad urgente de abordar los conflictos laborales que han plagado la planta durante años. Mientras la comunidad de Florencio Varela se recupera del shock de este ataque, las autoridades locales, junto con los representantes sindicales, deberán abordar las raíces de la problemática laboral que ha desencadenado esta violencia, asegurando un futuro más estable y seguro para los empleados del frigorífico La Huella.
