“Inútil”, según la definción del Diccionario de la Real Academia Española se refiere, textualmente, a aquel : “Que no sirve o no es apto para una función determinada”.
Esto viene a cuento porque es el término que podría definir a la Justicia de Florencio Varela en uno de los casos más conmocionantes de los que tenga memoria el distrito: la que se llamó la “masacre de Varela”.
A un año y siete meses de la madrugada en la que fueron asesinadas dos chicas de 16 y 17 años, y otras dos fueron heridas por alguien que les disparó cuando esperaban el colectivo,en plena calle en una de las arterias más utilizadas de la zona,la causa fue archivada. O lo que es lo mismo, quedó formalmente estancada. Un gran paso para la impunidad.
Hasta ahora, según refiere el abogado patrocinante de una de las sobrevivientes consultado por Infosur, el único acusado tenía 14 años al momento del crimen y como es un menor inimputable podría no ser condenado ni quedaría preso.
Es que uno de los grandes papelones judiciales tuvo justamente con una controversia entre la Justicia de mayores, la que ahora archivó la causa, y la de menores que entraron en una insólita disputa para dirimir quién se hacía cargo de la causa. Una causa que quema, aparentemente.
Fue así que, en primera instancia, el juzgado de menores rechazó hacerse cargo del expediente porque sostuvo que no había pruebas contra ese chico. Sin embargo, la Cámara Penal de Quilmes le ordenó que lo instruyese. Hasta ahora, tampoco se conocen avances.
La masacre ocurrió el 11 de febrero del 2017 a las 6.07, a metros de la esquina de Senzabello y Los Andes. Las víctimas fatales fueron identificadas como Denise Daiana Juárez (17) y Sabrina Barrientos (15), en tanto las sobrevivientes fueron Némesis Núñez y Magalí Pineda.
A FOJAS CERO
El expediente con siete cuerpos que la Justicia de Varela archivó en los últimos días deja traslucir realmente una enorme desorientación respecto de quien o quienes fueron los criminales. El o los asesinos actuaron en plena calle, baleó con disparos certeros matando a dos chicas y dejando con secuelas irreversibles a otras dos y nadie pudo aportar datos a la causa que puedan arrojar luz.
Desde que Luis Weiman, el único que estuvo detenido por la causa, quedó en libertad por decisión del fiscal que investiga la causa en marzo del 2017, no hubo nuevos datos y finalmente sobrevino el fantasma de la impunidad a raíz del archivo.
NISMAN
Efectivos de la Policía Federal que conformaron el gabinete criminológico que actuó en el caso del suicidio del fiscal Alberto Nisman, participó de la investigación de la masacre de Varela, según confirmó a Infosur el abogado de una las sobrevivientes, el Dr. Luis Logran.
En efecto, según pudo saber Infosur, el expediente contiene una serie de fotografías que reconstruyen el último recorrido de las cuatros chicas. En ese dossier, los detectivas detectaron, pocos minutos después del crimen, a un menor de edad corriendo por la esquina de las calles Granaderos y Monteagudo, aparentemente donde viviría el menor en cuestión.
¿EL SICARIO?
En un reconocimiento fotográfico una de las sobrevivientes señaló a un chico de 14 años como el autor de la masacre. El menor nunca fue detenido. Cuando la policía fue a buscarlo a su casa, su madre dijo que había viajado a Córdoba, a la casa de un familiar.
Para la Justicia de menores, ninguna prueba ubicaba al menor en la escena de la masacre, a excepción del testimonio de Magalí Pineda. La hipótesis tampoco planteaba un móvil para el ataque y cerraba el caso con un menor inimputable.
¿Cómo ese menor apareció en la escena? ¿Sería el chico a la que las adolescentes abrazaron y tiraron al barrio antes de llegar al lugar de la masacre? Y, por qué nadie más los vio en el momento de la balacera. Preguntan que se encaminan a no tener respuestas por la Justicia de Varela que terminó siendo inútil para esclarecer el caso más conmocinante del territorio varelense.
Iniciarán acciones legales al Ministerio de
Seguridad por el operativo en la escena de la masacre
El Dr. Luis Logran, patrocinante de una de las sobrevivientes de la masacre, Magalí Pineda, reveló a Infosur que está trabajando en el armado de una causa contra el fisco de la provincia por lo que consideró el “negligente obrar de las fuerzas de seguridad en el lugar del hecho donde se perdieron y se contaminaro absolutamente todas las pruebas. Gente moviendo las balas de lugar, pisando la sangre, sin que el lugar esté debidamente perimetrado”, remarcó el abogado.
Logran anticipó que considera que el Ministerio de Seguridad y el Poder Ejecutivo provincial debe responder por esas situaciones irregulares.
