Pese al mal clima, miles de personas asistieron a la misa que se llevó a cabo en la ciudad de Luján, bajo la consigna “Paz, Pan y Trabajo”. Un escenario montado en la puerta de la mítica Basílica, fue el lugar elegido para dar lugar a la ceremonia, que contó con una presencia masiva de trabajadores, dirigentes gremiales e intendentes.
En este contexto, el intendente Andrés Watson expresó sus sensaciones tras presenciar la jornada de reclamos a los gobiernos de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal: “fue muy emocionante esta proclama popular de paz, pan y trabajo para el pueblo argentino que la está pasando tan mal con la medidas políticas, económicas y sociales que están tomando el gobierno nacional y provincial que solo piensa en grupos minúsculos de poder, desfinanciando al país y arrodillándolo ante el poder del Fondo Monetario Internacional”, dijo el jefe comunal varelense; quien definió al encuentro como “un reclamo genuino y único del pueblo que quiere una mejor calidad de vida, y para eso tenemos que trabajar unidos y pensando en el pueblo.”
En horas previas al encuentro frente a la Basílica, Watson se reunió con distintos jefes comunales como Gabriel Katopodis (San Martín), Juan Zabaleta (Hurlingham), Fernando Gray (Esteban Echeverría) , Alberto Descalzo (Ituzaingó), Mariano Cascallares (Almirante Brown), y Verónica Magario (La Matanza), entre otros, donde los mandatarios comunales expusieron la preocupación que tienen en sus distritos al recorrer las calles y escuchar a la gente. “Nosotros estamos ahí para tratar de ayudar a los vecinos, pero el gobierno nos saca cada vez más recursos como el Fondo Federal Solidario, que ha quitado millones de pesos a todos los municipios del país”, detalló.
Con gran presencia de banderas argentinas flameando, a las primeras horas de mediodía comenzó la Misa que estuvo a cargo del obispo Agustín Radrizzani, quien luego de proceder a anunciar la entrada de la Virgen de Luján, comenzó con una extensa disertación en consonancia con la proclama popular por la paz, el pan y el trabajo: “tengamos la seguridad de que hoy Dios y la Virgen nos están escuchando. Todos nosotros los trabajadores y miembros de los movimientos populares recemos con confianza. Sabemos que son muchísimos los que necesitan la fuerza de Dios, recemos por todos ellos y por nuestra razón”; y agregó: “la separación entre los argentinos nos lástima, porque la violencia entre los hermanos nos duele, porque cuando hay exclusión hay mucho sufrimiento”.
Al culminar las palabras del obispo, la misa finalizó con la entonación de las estrofas del himno nacional argentino.
