Esta es una historia que mueve las fibras más íntimas del corazón. Se trata de la asombrosa y conmovedora travesía de Dobby, un perro galgo, y su dueño Marcelo, que vive en Florencio Varela, para volver a su hogar.
Primero fue el drama. Marcelo, decidió pasar unos días de descanso con su familia en Villanueva, una localidad perteneciente al partido de General Paz, distante a unos 20 kilómetros de General Belgrano y a unos 150 de Florencio Varela, en el mes de marzo. Allí sucedió la pesadilla, la mascota de la casa se perdió con toda la angustia que ello significa.
Marcelo no se quedó quieto, buscó por cielo y tierra. De esta manera, se acercó a la radio FM Primavera, de Genral Belgrano, que dio a conocer la historia y difundió fotografías de Dobby, buscando la colaboración de la comunidad para encontrarlo. Cada semana, Marcelo volvía a la zona con la esperanza de encontrar a su leal amigo, pero regresaba a Varela con el corazón apesadumbrado al no encontrarlo. A pesar de ello, Marcelo y su familia nunca perdieron la esperanza.
El perro que recorrió 150 kilómetros para volver a Florencio Varela
La sorpresa llegó ayer, jueves 29 de junio, alrededor de las 19:30 horas. Marcelo estaba en su hogar en Florencio Varela con su hija cuando escuchó ladridos de un perro que le resultaban familiares. Salió de su casa y, para su asombro, allí estaba Dobby.
Después de 90 días y tras recorrer varios cientos de kilómetros, el valiente perro había encontrado su camino de regreso a casa por sí mismo.
Pero la increíble hazaña de Dobby no finaliza allí ya que según relatan los vecinos de Lezama al portal INFOZONA, el perro fue avistado en esa ciudad, distante poco más de 70 kilómetros de General Belgrano.
Por primera vez se lo vio en la ruta 57, que une los distritos de Lezama y Pila, respectivamente, donde aparentemente intentaba orientarse. Su determinación por encontrar el camino correcto lo llevó a aparecer luego en la ruta 2, aún en su búsqueda incansable. Aunque varias personas intentaron acercarse y rescatarlo, el can se mostraba esquivo y evitaba cualquier intento de captura.
Durante dos días, el animalito se mantuvo en la zona, intentando encontrar su camino o tal vez esperando el momento adecuado para continuar su travesía. Sin embargo, después de ese tiempo, el perro desapareció sin dejar rastro.
Esta historia es un recordatorio conmovedor del vínculo especial que existe entre los humanos y sus mascotas, y del increíble instinto de supervivencia y orientación que poseen los animales. Dobby se ha convertido en un símbolo de valentía y determinación, inspirando a muchos con su increíble viaje de regreso a casa.
