Las propiedades inmobiliarias constituyen uno de los bienes más importantes de las personas. Ya sea que vivan en ellas o de ellas —alquilándolas—, es fundamental garantizar su integridad y cuidado.
Robos, incendios, accidentes o, incluso, malos cuidados o incumplimientos por parte de los inquilinos, son algunas de las amenazas que ponen en riesgo una propiedad. Por eso, es importante proteger nuestras casas.
Todo suma cuando se trata de la seguridad y existen diversas estrategias para implementar en el cuidado del hogar. En esta nota, repasamos cinco consejos fundamentales que nos permitirán proteger nuestra casa ante cualquier inconveniente.
1- Asegurar tu casa
Como ya dijimos, las casas o los bienes inmobiliarios son de suma importancia para el patrimonio de una persona. Por esta razón, resulta fundamental garantizar su seguridad. El primer consejo, entonces, será el de asegurar la propiedad para quedar cubiertos ante robos o accidentes.
En el caso de aquellos que alquilen, es recomendable contratar un seguro para el hogar de caución. Este sirve tanto para inquilinos que no cuenten con un respaldo como para los propietarios, ya que garantizará que se cumpla el contrato.
Un seguro nos permitirá resguardar tanto nuestra casa como los bienes que tenemos dentro. Es una buena manera de cuidarlos ante cualquier situación indeseada.
2- Tomar medidas preventivas
Por lo general, se dice que los accidentes son impredecibles, pero eso no es tan cierto. Existen muchos inconvenientes que podemos prevenir de manera muy simple.
Por ejemplo, para cuidar nuestra casa de incendios es importante revisar y mantener las instalaciones eléctricas y de gas periódicamente. También, se pueden instalar alarmas de incendio en puntos estratégicos.
Si vivimos en una zona de riesgo meteorológico, también podemos tomar los recaudos necesarios. Por ejemplo, en las regiones sísmicas, es importante asegurar todos los muebles a las paredes y no colgar vajillas ni elementos frágiles.
3- Instalar recursos antirrobo
A la hora de proteger el hogar de robos o intrusos, una buena opción es la de instalar ciertos recursos que sumarán a la seguridad de nuestro hogar. Es recomendable, por ejemplo, agregar cámaras, alarmas y puertas y cerraduras sólidas y seguras.
Además, se pueden agregar luces o sensores de movimiento para evitar merodeadores. Por otro lado, es importante revisar que no haya puntos débiles, como ventanas o puertas flojas por donde se pueda ingresar fácilmente. En ese caso, se podrá reforzar con rejas u otro tipo de elementos de seguridad.
Para terminar, repasamos algunas rutinas o hábitos que debemos tener en cuenta para proteger nuestro hogar de los robos:
- Cerrar siempre con llave la puerta y conectar la alarma al salir.
- No dejar llaves de repuesto ni afuera de la casa ni en el auto: Estos son lugares a los que los ladrones pueden tener acceso fácilmente.
- Revisar y actualizar las cerraduras de puertas y ventanas regularmente
- No comentar planes de vacaciones o salidas con desconocidos y evitar hacerlo en las redes sociales
- No guardar objetos de mucho valor en la casa
- No dejar entrar a desconocidos.
- Intentar que la casa parezca habitada cuando nos vamos: programar televisores o radios para que se enciendan o dejar algunas luces prendidas.
