Explotación, amenazas y encierro. Una mujer de Florencio Varela logró escapar tras dos años de cautiverio en una casilla en Ingeniero Allan, donde fue sometida a explotación sexual y amenazas constantes. El acusado, H.D.E., seguirá detenido por decisión del juez Diego Agüero, quien aplicó perspectiva de género al denegarle la excarcelación.
Una amistad que se convirtió en pesadilla
Hace tres años, la víctima, madre de dos niñas pequeñas, aceptó la ayuda de un hombre de 38 años tras atravesar una separación. Lo que parecía una solución a su situación de vulnerabilidad se transformó en un calvario. En una precaria casilla de madera con techo de chapa, el hombre la encerró, la explotó sexualmente y la amenazó con matar a sus hijas si intentaba escapar.
La mujer fue obligada a recibir hasta cinco clientes por noche, viviendo en condiciones inhumanas, sin acceso a higiene y bajo permanente terror.
La noche de la fuga de la precaria casilla
El 19 de noviembre pasado, tras un descuido del captor, la víctima logró escapar. Sin embargo, antes de huir, el hombre disparó contra ella con un revólver calibre .32. Milagrosamente, esquivó las balas y buscó refugio en la casa de un vecino, quien alertó a la policía.
Esa misma noche, la Policía Bonaerense allanó la vivienda del acusado, donde lo detuvieron y confiscaron un arma, dispositivos electrónicos y una cámara que podrían ser pruebas clave en el juicio.
Un juez que priorizó la perspectiva de género
El acusado solicitó la excarcelación, pero el juez Diego Agüero, del Juzgado de Garantías N°6, la denegó argumentando el riesgo hacia la víctima y los testigos. En su fallo, Agüero destacó la necesidad de garantizar la libertad de las mujeres de vivir sin violencia, citando el caso Lucía Pérez como precedente.
“La obligación es actuar con diligencia para prevenir, investigar y sancionar la violencia de género”, expresó el magistrado.
La víctima reconstruye su vida
Mientras el imputado enfrenta cargos por promoción de la prostitución, amenazas y tenencia ilegal de armas, la mujer intenta recuperar su vida junto a sus hijas, ahora libres de su captor.
Este caso reaviva el debate
La escalofriante experiencia de esta madre pone nuevamente sobre la mesa la urgencia de políticas firmes contra la violencia de género y la importancia de la justicia con perspectiva de género para proteger a las víctimas.
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