Si se quiere crear una página web o una empresa digital, estos servicios harán que tenga una mayor productividad dentro del gigante mundo de Internet .
Desde hace varias décadas las nuevas tecnologías se fueron insertando en la vida cotidiana. Pero fue en los últimos años que el panorama cambió por completo cuando se introdujeron nuevas modalidades de trabajo, de inversión y de ganancias a través de los sitios webs. Si uno desea invertir su tiempo y su dinero en una página, lo mejor es tener un Hosting y dominio propio, ya que éstos le sacarán el mejor provecho posible a su emprendimiento.
¿Pero para qué sirven? Por empezar es importante remarcar que todas las páginas cuentan desde el vamos con un Hosting. Éste, también denominado Alojamiento Web, es la capacidad de almacenaje que tiene un sitio. Su objetivo fundamental es brindar un sistema para guardar información, imágenes, videos o cualquier contenido al que se acceda vía Internet. Es un espacio físico que tiene el servidor por el cual se registran las webs.
Para que quede más claro, es como un disco duro, un lugar de almacenamiento en la nube donde se guarda absolutamente toda la información de la página. Y a través de ella se proporcionan las tecnologías y servicios necesarios para que los usuarios o clientes puedan ver el sitio a través de la red. El Hosting puede ser gratuito, aunque, como veremos más adelante, los pagos tienen muchos más beneficios a la hora de potenciar la web.
En relación al dominio, éste es el nombre con el que se puede encontrar una página. Su función es la de facilitar la memorización de la dirección de la misma, para que sea mucho más sencillo encontrar el sitio que se desea ver desde cualquier parte del mundo. Es lo que comúnmente se denomina la “dirección de la página web”. Nuevamente, este servicio también es sin costo, aunque siempre va a convenir tener uno que sea únicamente suyo.
¿Por qué pagar para tener un Hosting y un dominio propio?
Cuando una empresa o una persona física tiene un Hosting y dominio propio se la considera “dueña” de un espacio de Internet. A través de la página podrá publicar toda la cantidad de información que considere necesaria para atraer a los usuarios o clientes, y además se le permitirá obtener una mayor visibilidad y posicionamiento en la red.
A su vez, al apostar por un dominio personal, no sólo tendrá una mayor presencia en el mundo digital sino que también tendrá la posibilidad de registrar correos electrónicos personalizados. Es que una vez que se ingresa un dominio propio, se le otorga total exclusividad, lo que significa que nadie más podrá usar su nombre.
Entre los demás beneficios que tienen los Hosting y dominio propios son el refuerzo de seguridad de la página, aportando sistemas avanzados que incorporan garantías fiables para el cuidado del hardware y del software. En caso de que el sitio que se desee crear sea de comercio en línea, el Alojamiento Web le dará también las mejores conexiones que serán seguras, permanentes y estables, sin fallos ni errores.
Por último, pero no menos importante, el servicio hará que se destaque todo lo que esté relacionado al contenido audiovisual del sitio. Los clientes suelen apreciar que los textos estén claros, así como las imágenes bien ubicadas dentro de la página, y los videos con buen funcionamiento para que la experiencia de la navegación sea satisfactoria.
