Domingo sangriento en la Ruta 53: Accidentes múltiples dejan un saldo fatal de muertos y heridos
La madrugada del domingo se tiñó de rojo en la Ruta 53, escenario de una serie de accidentes, con dos siniestros viales que dejaron tras de sí un rastro de dolor y destrucción.
El primero y más devastador de los incidentes ocurrió alrededor de las 5:30 de la mañana, en la intersección de las rutas provinciales 53 y 6, cerca de la localidad de La Capilla. En esta zona rural, donde la visibilidad era casi nula debido a la espesa niebla, se desencadenó una secuencia de eventos que parecían sacados de una película de terror.
Todo comenzó cuando un Peugeot gris, que circulaba por la ruta 53, embistió por detrás a una camioneta que transportaba un tráiler con dos caballos. El impacto fue tan violento que la camioneta terminó en la banquina, mientras el tráiler quedó cruzado en medio de la ruta 6.
Pero el destino aún guardaba un giro más trágico. Un Fiat Siena, que transportaba a cuatro agentes del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) que regresaban a sus hogares después de una larga jornada laboral, se encontró de frente con el tráiler volcado. El choque fue inevitable y brutal.
El saldo de esta cadena de eventos fue devastador: un agente del SPB perdió la vida en el acto. La víctima, quien prestaba servicios en la Unidad 42 de Florencio Varela, encontró un final trágico a pocos metros de su lugar de trabajo. Otros seis heridos, algunos de gravedad, fueron trasladados de urgencia a hospitales de la zona.
Incluso los animales no escaparon a la tragedia. Los dos caballos que viajaban en el tráiler resultaron heridos y tuvieron que ser llevados a una veterinaria municipal para recibir atención.
Pero la mañana de horror no terminó allí. En otro punto de la misma ruta 53, a la altura de Cinco Esquinas, un vehículo que circulaba a alta velocidad protagonizó otro impacto, sumando más heridos a la ya trágica jornada.
La policía y los peritos trabajan arduamente para esclarecer las causas exactas de ambos accidentes. Mientras tanto, la comunidad de Florencio Varela y, en particular, el Servicio Penitenciario Bonaerense, lloran la pérdida de uno de los suyos.
La Ruta 53, una vez más, se ganó el triste apodo de «la ruta de la muerte». ¿Cuándo llegará el día en que podamos transitarla sin temor?
