«Se observa una mejoría sostenida en los parámetros cardiopulmonares», señala el parte médico respecto de la salud de la nena de 13 años que estaba a bordo del Fiat 147 la madrugada del lunes 20 de mayo. Sigue conectada a un respirador y medicada con antibióticos por una bacteria que afectaba su cuadro.
Pero, ante su evolución, los médicos programan una «resolución quirúrgica de sus fracturas».
Rocío ingresó el lunes 20 con un cuadro de politraumatismo grave, con un traumatismo craneoencefálico grave, contusión pulmonar bilateral, laceración hepática que requirió intervención quirúrgica y con fractura de fémur.