El centro de Florencio Varela se convirtió en un caos debido a la protesta de los choferes de la Línea 500, perteneciente a la empresa San Juan Bautista y nucleados en la UTA (Unión Tranviarios Automotor). La manifestación, que comenzó con el corte de la Avenida Calchaquí, se trasladó a la Plaza San Juan Bautista, justo frente al edificio municipal.
Además del bloqueo en varias calles, decenas de automovilistas quedaron atrapados sin poder mover sus vehículos, cercados por las unidades de transporte estacionadas. Los manifestantes reclaman que no se retire la concesión a la empresa tras el trágico accidente en el que falleció Sebastián Mieres.
Varios vecinos señalaron que los colectivos que se encuentran estacionados durante la protesta no son habituales en Florencio Varela. «Poné que estos colectivos nunca los vimos en Varela», comentó uno de los vecinos indignados por la situación.