Una pareja quedó detenida en las últimas horas acusada de vender drogas en el campo de Florencio Varela conocido como “El Pájaro”, y se le secuestraron casi 600 dosis de paco, la pasta base que consume una amplia población de la zona, según el informe policial.
En efecto, un hombre de 20 años y una mujer de 25 fueron detenidos por una partida policial de la comisaría segunda, luego de que varios vecinos dieran cuenta de la venta de droga en el enorme campo, una modalidad de distribución del menudeo que ya se asentó en el conurbano.
Según el informe al que tuvo acceso Infosur, cuando cayó la partida policial, la pareja se dio a la fuga efectuando varios disparos contra el personal uniformado, aunque ninguno resultó herido. La persecución para la mujer terminó a los pocos metros, mientras que el hombre logró ingresar al patio de una vivienda. Las fuerzas del orden concretaron un allanamiento de emergencia y también lo detuvieron, quedando ambos a disposición de la justicia local.
En la requisa oportuna, los efectivos policiales lograron contabilizar unas 586 dosis de pasta base, una gran cantidad de dinero y un teléfono celular.
No es fácil entrar a ese predio conocido como “El Pájaro” por la avioneta de la publicidad. Los ojos rehúyen, aunque la fama del “campo” llega lejos. Es un descampado justo en el cruce de las calles Dr. Portela y El Tero en Florencio Varela. Allí se vende droga por las noches. Las colas comienzan a las 19:30 hs. Y se extienden hasta altas horas de la madrugada. Vienen de Glew, de Lavallol y de distintos barrios varelenses.
En ese lugar, el 3 de marzo del 2019, fusilaron a Joel Carbajal, un joven de 18 años que venía desde Glew a comprar droga. Fue víctima de la banda que hace pie en esa zona conocido como “Los Paisa”. Lo que se pudo saber es que Joel estaba haciendo la cola para comprar cuando le pegaron y le dispararon. El cuerpo del joven estuvo alrededor de 11 horas en el lugar, hasta que fue encontrado por personal policial. Su familia y allegados ahora piden justicia por su muerte, y responsabilizan tanto a quienes lo acribillaron como a su primo que lo llevó hasta ese lugar. «Todos tienen que estar presos de por vida», dicen.