Fue hace 29 años. Un 16 de abril del año 1994. La inolvidable María Elena Walsh participaba de la inauguración del jardín de infantes de las artes y las ciencias que lleva su nombre en Florencio Varela. Con ella estuvieron Virginia Lago, Ana Maria Caso y Hugo Caprera.
Un verdadero reconocimiento a la compositora, cantautora, escritora, poeta, dramaturga y activista nacida en 1930, que ejerció su influencia en artistas de todas las generaciones y estilos musicales.
Walsh nació en 1930 en Ramos Mejía, provincia de Buenos Aires y, desde los 14 años, comenzó a publicar poemas en medios como El Hogar, el diario La Nación, Los Anales de Buenos Aires y Sur, obras que contribuyeron a consagrarla como una de las voces más intensas y originales de su generación.
Emigró a Europa, junto con su amiga tucumana, Leda Valladares, también poeta, con quien formaron el dúo vocal Leda y María, dedicado casi exclusivamente a cantar canciones tradicionales del Noroeste argentino.
En 1958, la directora de televisión María Herminia Avellaneda, impulsó a Walsh a escribir sus primeros libretos para teleteatro o para programas infantiles. Diez años después, Walsh estrenó su primer espectáculo de canciones para adultos “Juguemos en el mundo. Recital para ejecutivos”, un repertorio imbuido del aire contestatario de los tiempos –pacifismo, feminismo, “protesta” contra la injusticia social– pero mostrando un talento poético único.
En 1978, en plena dictadura militar, decidió dejar definitivamente las presentaciones teatrales, harta de las cortapisas de la censura.
En 1983, comprometida con la restauración de la democracia en los ámbitos más diversos, participó más o menos directamente en proyectos políticos, para recalar finalmente en la transformación de su gremio, la Sociedad Argentina de Autores y Compositores, donde su aporte en el Departamento Cultural fue decisivo.
No abandonó la infancia y presentó las novelas para chicos «Manuelita, ¿dónde vas?» (1997), «Hotel Pioho’s Palace» (2002) y «¡Cuánto cuento!» (2004). En 2008 publicó en forma de libro, por primera vez, la versión teatral original de «Canciones para mirar» y «Doña Disparate y Bambuco».
María Elena Walsh recibió en vida innumerables reconocimientos, homenajes y premios, en la Argentina y el extranjero. Uno de ellos es la escuela que en Varela lleva su nombre y acaba de cumplir 29 años de vida.