Empezar a recolectar los datos, uno por uno, de los últimos tiempos en cuanto a la seguridad de Florencio Varela, estremece. Mete miedo. Es la evidencia de que en territorio varelense la situación se ha vuelto descontrolada para la policía, en la que los robos a sucursales bancarias, la corrupción policial, el narcotráfico con su secuela de muerte, lo saqueos y robos se han enquistado entre los hogares y las calles del sur.
Los servicios de calle de tres comisarías de Florencio Varela fueron detenidos el año pasado acusados de extorsión. Agravado porque se sospecha que le pedía dinero a delincuentes para liberarlos o dejarlos trabajar.La sexta de Ingeniero Allan, la Cuarta de Bosques y la Quinta de La Capilla. En los tres resonantes casos, los comisarios fueron relevados.
A fin del año pasado un policía fue asesinado a balazos en un campo del barrio Paraná. Y aunque la información oficial señaló que fue durante la “usurpación” del predio lindante a la ruta 53, Infosur dio pormenorizado detalle de que se trataba de un descampado utilizado por una banda apodadada “Los Peruanos” que todas las tardes distribuían droga a la vista de todos. La jefatura distrital de la policía de Varela, a cargo del Comisario Ávalos, nunca respondió la requisitoria de este medio. Fue un tiroteo con motivo del narcotráfico. “Esto es tierra de nadie”, gritaban los vecinos cuando Infosur los consultó.
SALIDERAS BANCARIAS
En pocos minutos tres delincuentes perpetraron un golpe comando en la sucursal Florencio Varela del banco Santander Río. Se llevaron, según voceros confiables, por lo menos dos veces la cantidad de dinero informada que era de medio millón. Entraron como delincuentes, actuaron como avezados ladrones y se escaparon como si nada por las calles céntricas del distrito. Cuando el máximo responsable de la policía de la zona sur, a la que suele llamarse “General”, pidió la orden de servicio, el jefe departamental y el distrital transpiraron la “gota gorda”. No había. ¡Quién diagrama la seguridad en los principales bancos varelenses! Una orden de servicio del Comando de Patrullas lo salvó del papelón.
UNA VIOLACIÓN Y NADA
No se sabe. No hay rastros. Un sujeto violó a una abuela de 65 años en plena calle cuando iba a la iglesia y sigue impune. El hecho ocurrió a principio de mes en las calles Rio Jachal y Conesa. Según se denunció en la comisaría primera, la mujer fue violentada por un sujeto joven que la golpeó y la llevó hasta un sector oscuro del lugar donde abusó de ella. El sujeto, según la denuncia, la sodomizó con un objeto de tipo madera, lo que provocó heridas de consideración que fueron atendidas en el hospital Mi Pueblo de Florencio Varela.
MÁS CAMPOS DE LA DROGA
Lo que ocurría en el campo de la droga de Paraná no es exclusivo de esa zona. Una de las pocas comisarías prolijas de Varela, la sexta de Ingeniero Allan (después de la denuncia por extorsión) logró desarticular a la banda de los “Paisa” que vendían droga en un basural. Los principales referentes fueron detenidos en el marco de un extenso operativo que incluyó, además, viviendas.
No ocurre lo mismo con la comisaría cuarta. En las redes sociales se viene denunciando con insistencia lo que por lo bajo confirman los vecinos. En las adyacencias de la famosa Cava de Scarpatto se vende droga. Es zona liberada para el narcotráfico.
En otro terreno de la Cuarta, en la esquina de Oliden y Marcos Sastre, en la cancha de Kevin, en Villa Hudson los religiosos que oficiaban su ceremonia denunciaron que el domingo pasado había una cola de 200 metros para supuestamente comprar estupefaciente. Ahí tienen la dirección para que no se repita este domingo.
LA FIAT
Hasta ahora se mantenía en secreto lo que fue un verdadero saqueo a la cooperativa Luz y Vida que está ubicada en La Fiat, precisamente en la Ruta 53 y Montovani, justo al lado de la sede la policía local, seriamente cuestionado por las supuestas “quintitas”.
El robo a la cooperativa, según la denuncia radicada en la comisaría primera, ocurrió en las últimas horas y los desconocidos se llevaron todo. Absolutamente todo. Desde Tv hasta las herramientas de trabajo. Es increíble pensar que se fueron con tres “trompitos” de albañil, entre otras cosas, justo a metros de la sede la policía local. ¿Nadie los vio?
