Se conoció el audio que Reynaldo «Tito» López, el trabajador oriundo de Florencio Varela, le envió a su mujer minutos antes de perder el conocimiento producto de un «adoquinazo» que le desprendió el corazón.
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Nada presagiaba el difícil momento: el jueves a las 3.30, el hombre regresaba de su trabajo en moto por el Acceso Sudeste cuando alguien le disparó el inesperado proyectil y le dio de lleno en el pecho.
Lo que siguió después fue dramático. De acuerdo con fuentes policiales consultadas por este medio, cuando ya se había alejado una distancia considerable del asentamiento, “Tito”, aún consciente comenzó a pedir ayuda. En medio de la traza principal logró que una pareja detuviera su marcha y lo ayudara. Según el testimonio de una vecina de la villa, recopilado por la propia familia, un camión llegó a desviarse y por poco lo atropella. El matrimonio que lo auxilió llamó a la comisaría segunda de Quilmes y en muy poco tiempo fue trasladado al Hospital Iriarte.
Allí, la víctima fue atendida de urgencia y luego la derivaron al Sanatorio de la Trinidad Quilmes, donde los médicos constataron que presentaba un traumatismo cerrado de tórax, que le había lesionado la unión de la vena cava y la aurícula derecha, así como el ventrículo derecho. “Tuvo un desprendimiento cardíaco. Es un milagro que aún siga con vida”, agregó Ángel.
La testigo a la que hace referencia el familiar contó que en un momento López se cayó de la moto, empezó a gritar de dolor y luego empezó a caminar. Nuevamente se desplomó en el asfalto y se levantó otra vez. “Pasó un camión y gracias a Dios lo esquivó. Pero después se quedó un auto y ese matrimonio lo auxilió. Llamaron a la ambulancia y ahí nos quedamos con la incógnita de saber qué le pasó”, dijo la mujer a través de un audio que le envió a la familia de la víctima.
Durante los primeros momentos, el hombre logró mantenerse con cierto nivel de conciencia. De hecho llegó a enviarle un audio de WhatsApp a su esposa en el que le contó sin mayores detalles lo que pasó. La grabación muestra a “Tito” con una calma que sorprende debido a la gravedad del ataque que había sufrido.