La causa que involucra a Lautaro Morello (18) y Lucas Escalante (26) generó una montaña de documentos, con más de cuarenta cuerpos que detallan los giros y vueltas de un caso que estremeció a Florencio Varela y al país. La acumulación de fojas alcanza una altura impresionante de tres metros en el expediente judicial.
En el aula 118 de la Universidad Nacional Arturo Jauretche (UNAJ), el pasado miércoles 29 se llevó a cabo una charla abierta con familiares de Lautaro Morello, el joven desaparecido hace casi un año junto a Lucas Escalante, quien aún no fue encontrado. La abuela Mirian Aguilar fue una de las voces que se alzaron para exigir justicia y esclarecimiento.
El 9 de diciembre del 2022 marcó el inicio de uno de los capítulos más brutales de la historia de Florencio Varela. En ese día, Lautaro Morello desapareció junto a Lucas Escalante, y días después, el 15 de diciembre, la tragedia alcanzó su punto álgido con el hallazgo del cuerpo de Lautaro, cruelmente asesinado, mientras que Lucas continúa desaparecido. Estos delitos aberrantes sugieren la presencia de violencia institucional/estatal, específicamente vinculada a la policía bonaerense, y apuntan a un entramado político-mafioso que perdura en la localidad.
Tras un año de intensa investigación, quedó claro para la Justicia que la policía bonaerense no solo estuvo involucrada en los eventos, sino que también apoyó un papel crucial en el encubrimiento de culpables y cómplices. En el centro de estas acciones se encuentra el clan Centurión, con miembros destacados, incluyendo al Comisario Mayor Francisco Daniel Centurión, coordinador de la Oficina de Enlace entre Interpol y la Policía Bonaerense, su hijo Cristian Centurión, egresado de la Escuela de Policía Juan Vucetich. , y su sobrino Maximiliano Centurión. Otros detenidos incluyen al Comisario Inspector Sergio Argañaraz, el Oficial Ramiro Yair Forchinitto, el Oficial Damián Rodríguez y el Oficial Inspector Juan Manuel Brito.
A lo largo del proceso, cuatro fiscales y dos jueces de garantías trabajaron arduamente para evitar cualquier intento de construir impunidad.
A punto de cumplirse un año de estos crímenes atroces, la comunidad debe mantenerse informada. Por ello, la familia de Lautaro Morello y la Red de Organizaciones Comunitarias Monseñor Enrique Angelelli convocaron a esta actividad pública en la UNAJ. Este encuentro fue una oportunidad para conocer los avances de la causa y entender los motivos detrás de esta tragedia que aún busca respuestas y justicia.
En ese contexto, el abogado de la familia Carlos Dieguez, señaló que la prueba contra los detenidos en la causa es “abrumadora” y se espera la elevación a juicio donde podría haber una condena a “cadena perpetua”.