La bala extraída al cuerpo de la enfermera Griselda Beatriz Lassala (44), asesinada de un disparo en el pecho cuando se dirigía a una parada de colectivos para ir a trabajar y quedó en medio de un enfrentamiento entre dos bandas, partió del arma secuestrada al detenido que ayer seguía internado con una herida de bala, por lo que los investigadores creen que se trató del autor material de homicidio, informaron fuentes judiciales. El fiscal Hernán Bustos Rivas, de la UFI N° 5 Descentralizada de Florencio Varela, había ordenado el estudio comparativo entre la bala que mató a la mujer y la pistola Bersa calibre 9 milímetros secuestrada al delincuente Antonio Ferreyra (37), tras el crimen cometido en Florencio Varela.
Fuentes judiciales informaron que el resultado de la autopsia realizada el viernes a la tarde indicó que el cuerpo presentó un solo orificio de entrada en la parte izquierda del tórax. Además, el disparo fue de adelante hacia atrás, levemente de derecha a izquierda y lesionó la aorta, el pulmón izquierdo y le provocó a la víctima un hemotórax y un hemopericardio.
De esta manera, el fiscal Bustos Rivas le imputó a Ferreyra el delito de «homicidio agravado por el uso de arma de fuego y tenencia de arma ilegal de arma de fuego». Según las fuentes, el acusado purgó una condena de 12 años de cárcel por un secuestro extorsivo.
El funcionario judicial aguardaba la recuperación de Ferreyra, quien sufrió un disparo en la zona lumbar, para ser indagado por el crimen. El hecho ocurrió minutos antes de las 5.30 en la calle Islas Orcadas entre Arrecifes y Rauch de la zona de Villa Angélica, en el mencionado distrito de la zona sur del conurbano. Fuentes policiales y judiciales informaron que todo comenzó cuando la enfermera esperaba el colectivo para ir a su trabajo en el Hospital Neuropsiquiátrico Braulio Moyano.
Al advertir el tiroteo entre dos grupos, la mujer que se encontraba a unos cien metros intentó refugiarse en la parada de colectivos, aunque fue alcanzada por uno de los proyectiles que le impactó en el pecho y le produjo la muerte en el lugar antes de llegar a ser asistida.
A raíz del mismo hecho, cuyas motivaciones no fueron determinadas hasta el momento, un hombre que trabaja para la empresa de seguridad privada Codecop y que también pasaba por el lugar recibió un impacto de bala en la mano derecha, aunque quedó fuera de peligro.
Tras ser asistido en el hospital de Florencio Varela, declaró sobre lo ocurrido ante los investigadores, agregaron los voceros. Luego del tiroteo y a unos 150 metros del lugar, la Policía detuvo a uno de los presuntos partícipes del enfrentamiento con una herida de arma de fuego en la zona lumbar, por lo que fue llevado al hospital y quedó internado en observación. Ese hombre primero dijo llamarse Ezequiel Aguirre, pero luego la Policía chequeó sus huellas y en realidad fue identificado como Antonio Ferreyra, añadieron las fuentes.