La Justicia ordenó seguir investigando la muerte de Nahuel Sanabria, el joven varelense que murió tras una presunta golpiza en una distribuidora de bebidas. La decisión se tomó tras la presión de la familia, que denunció irregularidades en la causa.
Por Redacción Infosur
(Con información de Data Judicial)
El caso de Nahuel Sanabria, el joven de 25 años de Florencio Varela que murió en circunstancias dudosas en diciembre de 2023, vuelve a abrirse. Así lo resolvió la Fiscalía General del Departamento Judicial de Quilmes, que ordenó reactivar la investigación luego de las insistentes denuncias de su familia, que asegura que fue asesinado a golpes por cuatro hombres en una distribuidora de bebidas.
El expediente, que había sido archivado por la fiscal Karina Gallo, fue reabierto por orden del fiscal general Marcelo Draghi, con la intervención del fiscal adjunto Pablo Leguizamón, quien firmó una resolución clave de tres carillas. En ella, se destaca la necesidad de recibir testimonios a testigos presenciales que puedan aportar información sobre el accionar de la Policía Científica al momento de preservar la escena.
“De acuerdo a las diferentes irregularidades señaladas por los familiares de la víctima respecto a la preservación del lugar, estimo oportuno que se le reciba declaración a testigos”, indica el documento oficial citado por Data Judicial.
Una muerte con muchas dudas
Nahuel Sanabria murió el 19 de diciembre de 2023, tras ir a comprar vino a una distribuidora cercana a su casa. Según relató su familia, los empleados se negaron a venderle por unidad, lo que desató una discusión. En medio del altercado, cuatro hombres —entre ellos el dueño del local y dos hermanos que trabajaban con él— son acusados por la familia de Nahuel de haberlo golpeado brutalmente, provocándole la muerte.
La autopsia oficial determinó que el fallecimiento se debió a una “insuficiencia respiratoria aguda, secundaria a una insuficiencia cardíaca aguda producida por una miocardiopatía hipertrófica”, según informó la Morgue Policial de Ezpeleta.

Pero los padres de Nahuel descreen por completo de ese informe: aseguran que su hijo nunca tuvo problemas cardíacos y que el certificado de defunción fue manipulado. “Dice que murió en nuestra casa, y que fue por una cardiopatía hipertrófica, pero Nahuel jamás tuvo esa enfermedad. Es inexistente, no figura en ninguna historia clínica”, denunció su madre.
La lucha de la familia
Ante el archivo de la causa, familiares y amigos de Nahuel organizaron una movilización la semana pasada frente a la Fiscalía General de Quilmes. Con el respaldo de sus abogados, lograron ser escuchados por el fiscal Leguizamón, quien finalmente ordenó que la investigación continúe.
Ahora, la fiscal Karina Gallo deberá seguir adelante con el expediente, pero con nuevas líneas de investigación y bajo supervisión directa de la Fiscalía General. La familia espera que finalmente se haga justicia.
“Solo queremos saber la verdad. Que no lo encubran. A Nahuel lo mataron”, dijeron sus padres a medios locales.
El caso Sanabria vuelve a sacudir a Florencio Varela y pone en el centro de la escena la lucha por justicia de las familias que no se resignan al olvido.