El obispo auxiliar de Quilmes, Marcelo Julián Margni, conocido como el “Padre Maxi”, fue víctima de un hecho delictivo, informaron a Infosur desde la curia.
Después de concluir con el cierre de la Carpa Misionera en Bernal Oeste, el Padre Obispo Maxi fue interceptado por unas personas que le robaron -a mano armada- sus documentos, su teléfono celular, su mochila con cosas personales, el vehículo y algunos ornamentos de obispo, como su báculo.
El Obispo Margni agradece los mensajes de solidaridad y apoyo que le hacen llegar.
Si alguna persona llegara a encontrar el báculo (bastón de madera alto con el extremo curvo) o algún otro ornamento religioso del obispo, se agradece lo puedan acercar a cualquier parroquia o capilla de la diócesis de Quilmes.