El ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia, Héctor Negri, falleció anoche en el hospital donde se encontraba internado desde hacía un mes. Era el ministro decano de la Suprema Corte bonaerense, a la que había accedido en 1983 durante la administración del entonces gobernador radical Alejandro Armendáriz- sino también un intelectual agudo, autor de destacados libros jurídicos y literarios.
Había nacido en Banfield el 23 de marzo de 1940, donde siguió viviendo hasta sus últimos días. Él se definió alguna vez como un abogado precoz (se recibió a los veinte años) y, luego de ejercer algún tiempo su profesión, llegó a ser profesor de Filosofía del Derecho en las universidades nacionales de La Plata, Lomas de Zamora y Buenos Aires, enhebrando a partir de allí una intensa trayectoria docente. Por sus méritos en la cátedra y en la defensa de principios democráticos fue llevado a la Corte provincial.
Así, fue homenajeado recientemente por la Cámara de Diputados de la Nación, por su contribución a la cultura y a las letras argentinas y, posteriormente, por la Universidad de Buenos Aires, en reconocimiento a sus cincuenta años de trayectoria docente.
Recibió el premio Alba de América otorgado por el Instituto Literario y Cultural Hispánico con sede en California, en mérito al valioso aporte a la literatura del mundo hispánico y el premio José Hernández de la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires. Así también, la Sociedad Argentina de Escritores lo designó como Embajador de las Letras de la Sociedad Argentina de Escritores, galardonándolo con la Faja de Honor en 2015.
Fue declarado Vecino Ilustre de la ciudad de Lomas de Zamora y Ciudadano Ilustre de la Provincia de Buenos Aires por su trayectoria en los campos jurídico, académico y literario; así como, según señalan los fundamentos de la iniciativa, por su constante defensa y compromiso con la democracia, la justicia y la dignidad social.