Un escalofriante caso de maltrato animal puso en evidencia la crueldad humana y la alarmante ineficacia de las instituciones de Florencio Varela encargadas de proteger a los animales. Un perro fue víctima de un ataque brutal por parte de su propio dueño, en un incidente que dejó a los vecinos consternados y a las autoridades de la Dirección de Bromatología y Zoonosis de la comuna en el centro de la polémica.
Según informes recibidos por este medio que fuera oportunamente publicado en el portal de noticias, el hecho ocurrió en una vivienda de Florencio Varela, donde el can sufrió una golpiza despiadada que incluyó la introducción de un palo en su garganta. La gravedad del caso provocó la inmediata reacción de los vecinos y una ONG proteccionista de animales, quienes no dudaron en presentar una denuncia formal.
La denuncia por maltrato animal recayó en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Florencio Varela, contando con el patrocinio letrado de la Doctora Marcela Loyola. Sin embargo, lo que debería haber sido una rápida intervención de las autoridades competentes se convirtió en un vergonzoso ejemplo de negligencia institucional.
¿Qué pasa con zoonosis Varela que tuvo que intervenir Lomas de Zamora?
La Dirección de Bromatología y Zoonosis de Florencio Varela, organismo encargado de velar por el bienestar animal en el municipio, brilló por su ausencia. Pese a la existencia de un oficio judicial que ordenaba el rescate y resguardo del perro maltratado, la dependencia municipal no realizó ninguna acción concreta para proteger al animal herido.
La inacción de Zoonosis Varela llegó a tal punto que fue necesaria la intervención de su contraparte en Lomas de Zamora. Actualmente, el can se encuentra bajo la custodia de esta última institución, donde se está evaluando su estado de salud y potencial peligrosidad, tareas que deberían haber sido realizadas por las autoridades varelenses.
El caso tomó un giro aún más dramático cuando un proteccionista animal intentó rescatar al perro por sus propios medios. Un llamado al 911 alertó sobre la situación, pero cuando la policía llegó al lugar, el individuo ya no se encontraba allí, presumiblemente debido a la violenta reacción del dueño del animal.
Ante la falta de acción local, la Veterinaria de la Policía de la Provincia de Buenos Aires tuvo que intervenir. Personal de esta institución realizó una observación del perro y elaboró un informe pericial en la comisaría.
La abogada Marcela Loyola, quien está liderando los esfuerzos legales en este caso, expresó su frustración ante la situación: «Es inconcebible que, ante un caso tan grave de maltrato animal, las autoridades locales no hayan actuado con la urgencia necesaria. El perro no recibió asistencia médica inmediata por sus lesiones ni fue puesto a resguardo como correspondía».
Según se pudo establecer, la ONG Prodea y la abogada Loyola mantuvieron conversaciones con la Fiscalía 1 de Varela, a la que se le solicitó por escrito que se pusiera al perro bajo resguardo y se le realizara una pericia médico veterinaria por parte de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Además, se enviaron a la Fiscalía fotografías del día del suceso que, sorprendentemente, la policía nunca había remitido.
Como resultado de estas gestiones, la Fiscalía envió un oficio tanto a Zoonosis Varela como a la Veterinaria de Policía. Sin embargo, la respuesta de Zoonosis local siguió brillando por su ausencia, lo que llevó a la necesaria intervención de instituciones de otros municipios.
Este caso puso de manifiesto graves falencias en el sistema de protección animal de Florencio Varela. La falta de acción inmediata por parte de Zoonosis local no solo puso en riesgo la vida del perro maltratado, sino que también envía un mensaje preocupante sobre la prioridad que se le da al bienestar animal en el municipio.
Mientras el caso sigue su curso legal, con la Fiscalía a la espera del informe pericial de la Policía Provincial, queda claro que Florencio Varela necesita una revisión urgente de sus protocolos y capacidades para atender casos de maltrato animal.
