Joaquín Arias cuenta que mientras unos patovicas le daban una brutal golpiza pensó que no salía vivo del boliche San Luis de Florencio Varela. Había ido a divertirse pero lo tocó bailar con la más fea, la violencia de unos hombres de seguridad.
Según la denuncia que radicó el joven en la comisaría tercera, a pocos pasos del polémico boliche, todo ocurrio el lunes pasado cuando había ido a bailar con su novia y su cuñado al local nocturno ubicado sobre la avenida Senzabello y fue atacado de forma sorpresiva por los patovicas del lugar.
“Me sentía mal, fui al baño y entraron ocho patovicas diciendo que estábamos ebrios cuando no lo estábamos. Me agarraron del cuello, me dejaron la cara destruida, casi me matan”, contó el joven al canal de noticias TN.
“Todavía no entiendo por qué hicieron esto, también lastimaron a mi cuñado. Quiero denunciarlos públicamente porque no hay excusa, es como si estuvieran entrenados para matar”, agregó el joven agredido.
Entre otros problemas de salud, por los golpes Joaquín presenta dolores en la zona de los pulmones, las costillas y la cabeza. De todos modos, lo más afectado ahora es el ojo izquierdo y debe avanzar con varios tratamientos médicos para evitar complicaciones.
Joaquín tiene 20 años, al igual que su novia Noelia, y Ezequiel, su cuñado, tiene 22. Los tres jóvenes coincidieron en que “no es la primera vez que pasa un ataque de este tipo, aunque mucha gente lo naturaliza o tiene miedo de denunciar”. “Estas personas trabajan en varios locales bailables”, denunciaron.
“Se aprovecharon de la situación y lo golpearon en el baño. Desde el baño hasta la puerta de calle mi hijo estuvo inconsciente”, enfatizó el padre de la víctima y continuó: “Ya hicimos la denuncia en la comisaría N°3, necesitamos que la policía los investigue″.