Jorge Campos, padre de uno de los bomberos que falleció en el incendio de la empresa Iron Mountain de 2014, afirmó que el nuevo fuego que comenzó ayer en el mismo depósito demuestra que «en nueve años no cambió nada» y lamentó que «otra vez» volvieron «a revivir la pesadilla». Al hijo de Campos le decían «El Flaco» y vivía en Florencio Varela.
«Otra vez volvimos a revivir la pesadilla del incendio. Esta gente parece que no se conforma», dijo Campos, padre de Sebastián, tras el incendio que se desató ayer por la tarde en el contrafrente del depósito de la firma Iron Mountain, en el barrio porteño de Barracas.
«Es muy suspicaz. Hace diez días atrás presentaron una nota con respecto a que habían vandalizado esa parte de Iron Mountain», agregó el hombre en diálogo con Radio 10.
Sin embargo, Campos relató que había recorrido el lugar con su esposa porque están «buscando pedir un permiso para un mural» en homenaje a las víctimas del incendio de 2014 y observaron que «la puerta estaba forzada, pero no la pudieron abrir».
«La otra puerta estaba con dos candados. Y ayer yo escuché que los bomberos tuvieron que usar una motodisco para abrir la puerta. Entonces, no había nadie. Decían que había gente trabajando y todo lo demás, pero creo que es una gran mentira», señaló Campos.
Además, insistió en que el incendio fue intencional y apuntó que «los que están mandando ahora bajan con una línea de que le han dicho ‘se tiene que quemar todo'».
«Ayer llegaron los bomberos y plantearon el ataque. Después llegaron los bomberos de la Ciudad y cambiaron el planteamiento del ataque y lo único que hicieron fue enfriar las paredes, no hicieron un ataque directo y están dejando que se queme todo. Es muy raro todo», puntualizó el hombre.
Por otro lado, Campos estimó que a la empresa «el peritaje le va a salir a favor ahora. Entonces, van a decir que como fue ahora puede haber sido la vez pasada, que decían que habían sido víctimas de un sabotaje».
Asimismo, lamentó: «En nueve años no cambió nada porque de vuelta los aspersores no andaban y si había gente trabajando adentro, teóricamente, las cisternas tendrían que estar llenas y los aspersores tendrían que haber funcionado».
Consultado sobre cómo recibieron la noticia del nuevo incendio los familiares de los bomberos fallecidos, Campos dijo que «es todo angustia».
«Se vuelve a prender fuego, volvemos a sentir las mismas sensaciones de desesperanza y que no pasa absolutamente nada», puntualizó.
En la misma línea, indicó que «ellos jugaban a que nunca iba a pasar nada, que nunca lo iban a elevar a juicio y que nunca iban a tener que pagar absolutamente nada».
Y concluyó: «Se equivocaron porque son 18 los que están en conflicto, pero los actores intelectuales nada, ni los llamaron».
El 5 de febrero de 2014 el mismo depósito de Iron Mountain, donde se resguardan archivos bancarios de grandes empresas, se incendió y murieron 10 personas, 8 de Bomberos y dos de Defensa Civil.
Por el hecho se inició una investigación a cargo de la jueza Fabiana Palmaghini, quien el 12 de abril pasado envió a juicio oral y público la causa que tiene 18 imputados, entre ellos directivos de la empresa y exfuncionarios de la Dirección General de Fiscalización porteña.
Demolieron una pared de Iron Mountain debido al «alto riesgo para vecinos y bomberos»
Bomberos de la Ciudad continuaron hoy con las tareas para sofocar el incendio que se desató ayer en el depósito de Iron Mountain, ubicado en la calle Gaspar Jovellanos al 1300, en el barrio de Barracas, y demolieron una pared que representaba «un alto riesgo para vecinos y bomberos», informaron fuentes policiales.
Los efectivos siguieron con las tareas para combatir los focos activos y se hizo un estudio de las paredes ante un nuevo riesgo de derrumbe.
En consecuencia, los tres equipos de Guardia de Auxilio procedieron a la demolición de una pared de la calle Jovellanos que tenía una inclinación sobre la vía pública y «podría generar un alto riesgo para vecinos y bomberos», indicaron fuentes policiales.
También explicaron que esta demolición «posibilitará el trabajo de extinción de Bomberos».
Se encuentran en el lugar personal de Comisaría Vecinal 4 D de la Policía de la Ciudad, el SAME, Defensa Civil y Logística de la Ciudad.
En un primer momento intervino en la causa por averiguación de incendio, la Unidad de Flagrancia a cargo de la doctora Luciana Astardjian, y el caso quedó bajo la investigación de Fiscalía Nº 30 a cargo del doctor Diego Espada.Este lunes, dos paredes del depósito se derrumbaron, una de manera parcial y otra total, sin reportes de daños personales.
Fuentes de Seguridad y de bomberos de CABA informaron que el incendio fue «circunscripto» y su extinción demandará «dos semanas».
El 5 de febrero de 2014 el mismo depósito de Iron Mountain, donde se resguardan archivos bancarios de grandes empresas, se incendió y murieron 10 personas, ocho de Bomberos y dos de Defensa Civil, a causa del derrumbe de una pared.
El 12 de abril pasado la jueza Fabiana Palmaghini envió a juicio oral y público la causa en la que se investigan el incendio de 2014, un expediente en el que hay 18 imputados entre los que figuran directivos de la empresa y exfuncionarios de la Dirección General de Fiscalización y Control del gobierno porteño, como así también un empleado de seguridad de Iron Mountain que estaba en funciones cuando se inició el incendio.