Los pasillos son estrechos y no hay calles. Algunas de las casas de chapas y cartón tienen doble salida. Todos miran cuando entra un desconocido. La Villa Itatí, en Quilmes, una de las más grandes de latinoamérica es un territorio de doble faz. Una de ellas, la más conocida, es un mundo oscuro dominado por el hampa y la droga.
Dos hombre cruzaron esos largos pasillos con paso firme, como si fuesen conocidos en la humilde barriada. El oscuro manto de la noche ya había caido sobre la zona. Eran las siete de la tarde y las lamparitas amarillas no alcanzaban a iluminar los sectores más ocultos.
Entraron en una casa de Chaco al 600, en cuyo fondo funciona un criadero de chancho. Buscaban a Magalí Otranto, de 25 años, y a Morena Saucedo, de 29.
Los vecinos escucharon gritos y disparos. Cuando llegó la policía, encontró a Magalí con un tiro en la cabeza. Más allá, Morena también había sido fusilada. “En la casa no faltaba nada. Se sospecha de un ajuste de cuentas narco”, contó a Infosur una fuente de la investigación.
En efecto, las dos mujeres fueron asesinadas a balazos por dos hombres que, tras ejecutar a sus víctimas, huyeron sin robar nada, y los investigadores están convencidos de que el doble crimen está relacionado a una venganza narco, informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió cerca de las 19 del miércoles en una vivienda en cuyo fondo funciona un criadero de chachos en la calle Chaco al 600, de Villa Itatí, partido de Quilmes, en el sur del conurbano bonaerense.
Según las fuentes policiales, allí fueron encontradas asesinadas Magalí Otranto, de 25 años, y Morena Saucedo, de 29, quienes presentaban varias heridas de bala en su cuerpo.
Los vecinos relataron a los investigadores que todo comenzó cuando dos hombres armados ingresaron a la vivienda por la fuerza y comenzaron a discutir con las dos mujeres que se hallaban en ese momento en el lugar.
Los dos agresores fueron identificados por los vecinos como Mario y otro hombre de nacionalidad peruana al que apodaron Ben Diez.
En la vivienda, los vecinos escucharon gritos y una fuerte discusión hasta que finalmente se oyeron varios disparos, tras lo cual los homicidas se dieron a la fuga corriendo.
Los vecinos fueron quienes llamaron a la policía, por lo que se trasladó al lugar personal del grupo de la Unidad Táctica Operativa Inmediata del destacamento de Villa Itatí, que constató la muerte de las dos mujeres.
Los investigadores determinaron luego que el sospechoso llamado Mario es un hombre con antecedentes penales por venta de drogas y la policías había allanado días atrás su casa en el marco de una causa por infracción a la Ley de Drogas, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción 20 de Quilmes.
Los pesquisas creen que el doble crimen puede estar vinculado a ese allanamiento que realizaron en la casa de Mario, por lo que la principal sospecha apunta a una venganza narco.
El hecho es investigado por el fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción 3 de Quilmes, Martín Conde, quien pidió la declaración de varios vecinos para que aporten más datos sobre la fisonomía de los agresores.