«Página 1 – Messi pela Argentina – Divul» (Public Domain) by Prefeitura de Belo Horizonte
Al acabar el encuentro entre España y Argentina, Lionel Messi ejerció de capitán alentando a los suyos a que las cosas serán diferentes en el Mundial de Rusia.
Del encuentro que Argentina vivió en el Wanda Metropolitano poco se puede sacar como positivo de cara a cumplir con las expectativas sobre las apuestas online que ven a Argentina como campeona del mundo en Rusia, cómo podemos ver aquí: https://extra.bet365.es/news/es/futbol/Futbol-Internacional/laboratorio-de-pruebas-en-manchester.
El 6-1 final fue demoledor tanto para el seleccionador como para los aficionados de la albiceleste, que no se podían creer estar tan alejados de un equipo que debería estar a un nivel similar al suyo. Todo era malo, excepto para una persona, que supo ver el lado positivo de las cosas y aprovechar esa derrota para ir hacia arriba: Lionel Messi.
La ‘Pulga’ no pudo jugar, pero vio la mayoría del encuentro desde la grada, hasta que tras un gol español no aguantó más y abandonó su asiento en busca del vestuario. Allí esperó al resto de sus compañeros para ofrecerles ánimos y darles un mensaje: a pesar del gran varapalo, en junio estarán listos para ganar el Mundial de Rusia.
A Messi en muchas ocasiones se le ha tachado de falta de compromiso con Argentina, o incluso, de falta de liderazgo a la hora de ser el capitán del equipo. En el FC Barcelona ha demostrado tener mucho carácter cuando lleva consigo el brazalete que le permite ser el jugador que habla con el árbitro o que debe mediar con el otro equipo. Pero con la albiceleste quizás nunca había tenido un comportamiento tan llamativo desde que fuera nombrado capitán.
Seguramente, esto se deba a la madurez tanto psicológica como futbolistas que está alcanzando Messi en los últimos tiempos. El 10 sabe que esta es su gran oportunidad de ganar el Mundial y una derrota insignificante en un partido amistoso en casa de su rival no le alejará de su idea de lograrlo.
Es consciente de que ya en el Mundial de Brasil, en el 2014, nadie confiaba en ellos, pero poco a poco fueron pasando eliminatorias hasta plantarse en una final en la cual no pudieron acabar con el gran poderío de Alemania. En base a esta experiencia, tanto Jorge Sampaoli como Leo han planificado un trabajo que perfectamente les podría llevar a conquistar el tercer Mundial que tanto ansía Argentina, aunque para ello, quizás era necesario primero tocar fondo para coger una mayor perspectiva de las cosas y saber qué dirección tomar.
Y ese fondo seguramente muchos de sus compañeros lo tocaran el pasado martes 27 de marzo en el Wanda Metropolitano, cuando en la segunda parte del amistoso ante España, no paraban de encajar goles como si de un equipo muy simplón se tratasen.
Sin embargo, Messi ha convencido a los suyos de que este hecho es algo aislado y de que en el Mundial las cosas serán bien diferentes. La voz de un capitán al que siempre se le escucha, pero pocas veces se le oye hablar. Al menos hasta hace poco, porque en esta ocasión parece que Leo ha sabido leer perfectamente la situación y reconducirla, aprovechando una debilidad como una motivación para superarse. Todo un acierto por parte del mejor jugador del mundo.