El pan duro colgaba en una bolsa amohosado. Era lo único que tenían para comer los 5 niños en la precaria casa del barrio de Ingeniero Allan en Florencio Varela. Estaban imperdonablemente abandonados. Y no era la primera vez que quedaban a la buena de Dios.
Cinco niños de 4 a 13 años fueron rescatados por personal policial de la comisaría sexta que comanda el subcomisario Rubén Romero, luego de que una llamada telefónica anónima los alertara sobre la calamitosa situación de los infantes.
Según señalaron a Infosur las fuentes policiales, los niños se encontraban en pésimo estado, en una vivienda ubicada en las calles 1126 entre 1133 y 1135, en cuyo interior reinaba el desorden y un intenso olor a podrido que emanaba de alguna comida que había quedado en mal estado. «Cuando entramos a la casilla encontramos un desorden total, comida en mal estado en la mesa, ropa tirada en el suelo», señaló una de las mujeres que participó activamente del rescate de los menores.
Los vecinos que dieron cuenta de la situación a Infosur señalaron la actuación del encargado de la comisaría, Rubén Romero y de la Sucomisario que encuentra al frente de relaciones con la comunidad de la seccional, Vanesa Fleita.
Según voceros calificados, estos niños ya habían sido abandonados por los padres hace más de un mes, cuando los efectivos policiales habían dado el parte a «Niñez», quién a su vez decidió entregar la tutoría a una tía. La mujer no se encontraba en la casa al momento del rescate y los voceros señalaron que la madre tiene «restricción de acercamiento a los menores y al domicilio».
Los niños fueron trasladados a la comisaria donde fueron revisados por personal médico, los mismos uniformados les dieron alimentos y bebidas y buscaron un lugar en El Pato para que puedan estar los cinco hermanitos juntos.
Conocida la noticia, los vecinos del barrio fueron acercando ropa y comida para dar una mano. Interviene la UFI 5 de Florencio Varela.