Nada es por qué sí. La manera en que se concretan los brutales femicidios hablan, como todo en la vida y en la muerte. La gran mayoría ocurren por golpes y disparos a la cabeza, queriendo, quizás, callar, enfrentar al enemigo que vale menos.Un código patriarcal que domina nuestra sociedad.
Así, Paola Pereyra (36) fue la nueva víctima de femicidio de Florencio Varela. El acusado, su ex pareja, identificado como Mario Ernesto González (48) por los voceros policiales. Paola se había animado a pensar que podía tener otra vida, lejos de su marido y cerca de su madre.
Este nuevo femicidio ocurrió este viernes pasadas las 22 horas en el partido de Florencio Varela –en el límite con Quilmes–, cuando un hombre le disparó un escopetazo a quemarropa en el rostro a su exnovia, luego de haber mantenido una discusión y en plena calle.
Tras las primeras averiguaciones realizadas, el femicida se habría trasladado hasta el domicilio de Pereyra para llevarle comida a los hijos menores de ella, producto de una anterior relación de pareja, y del interior de la finca salió otro hombre, que posiblemente sería el nuevo novio de la víctima, lo que habría desencadenado el enojo y posterior accionar criminal de González.
El acusado intentó fugar pero fue detenido por los propios vecinos a una cuadras quienes quisieron lincharlo.
En la causa interviene el titular de la UFIJ Nº Descentralizada de Florencio Varela, fiscal Hernán Bustos Rivas, quien a última hora de este viernes pretendía terminar de dilucidar el móvil del asesinato y los pesquisas se abocaban también al hallazgo del arma homicida.