Uno tira un cable, el otro calibra el monitor y aquel asiste en la integración del circuito del respirador artificial. Todos son estudiantes de la Universidad Nacional Arturo Jauretche de Florencio Varela. La misma que este año va a cumplir una década de la inauguración y que son clave en la asistencia y puesta en marcha del equipamiento de los hospitales modulares, creados en distintos distritos para contener la demanda creciente por contagios de COVID-19 en la región.
Alumnos y docentes de la carrera de Bioingeniería, junto a técnicos del Hospital El Cruce de Florencio Varela, son los encargados de las tareas. Días atrás, el intendente de Hurlingham, Juan Zabaleta, destacó el trabajo en un video publicado en las redes sociales luego de dejar listo y poner en marcha el hospital modular llamado “Papa Francisco” que ya recibió a los primeros pacientes.
Estudiantes y docentes de la UNAJ vienen sosteniendo un papel preponderante en la asistencia en el marco de la pandemia. Son voluntarios en el call center de la Municipalidad de Berazategui, que hace seguimiento de los pacientes recuperados de Covid 19 o de los familiares de contagiados que están en cuarentena.
Alumnos del instituto de salud ponen el cuerpo en las estaciones de trenes para los testeos y han sido parte de la red que asistió y contuvo brotes como los de Villa Azul en testeos casa por casa.
Atrás parece haber quedado aquellos cuatro años de discriminación y zonceras como la de “los pobres no van a la universidad”. No fueron fáciles esos momentos en los que se tuvo que echar mano a un abrazo solidario de la comunidad para poder garantizar la continuad en el pago de sueldos.
O la pérdida del predio de Sueños Estelar, la fábrica de colchones, que había sido expropiada para campus y hospital universitario, porque el gobierno de Mauricio Macri no pagó la correspondiente indemnización a los propietarios.O la falta de financiamiento para terminar la escuela secundaria técnica en el barrio San Francisco.
En medio de la pandemia, parece haber quedado claro el rol activo e institucional de la universidad y sus integrantes.
La puntada final en los hospitales modulares.
Estudiantes de la carrera de Bioingeniería de la Universidad Nacional Arturo Jauretche, junto a docentes y técnicos del Hospital El Cruce (HEC) de Florencio Varela, realizan la instalación y puesta en marcha del equipamiento de los hospitales modulares, creados en distintos distritos para contener la demanda creciente por contagios de COVID-19 en la región. Esta semana dejaron listo y en funcionamiento el centro modular anexo al Hospital “Papa Francisco” (ex UPA) en Hurlingham. Allí se instalaron 24 camas de terapia intensiva y 56 camas de terapia intermedia, con los respiradores y el equipamiento necesario.
“La presencia de estudiantes y docentes de la carrera de Bioingeniería, aportando conocimiento y compromiso con la sociedad, evidencia una de las tantas contribuciones de la UNAJ frente a la pandemia mundial de COVID-19”, señala el ingeniero Fernando Ballina, coordinador de la carrera de Bioingeniería.
El de Hurlingham es uno de los 12 centros que construyó el gobierno nacional con el objetivo de ampliar la red de emergencia para atender la pandemia. El resto de los hospitales modulares se encuentra en Almirante Brown, Florencio Varela, General Rodríguez, Lomas de Zamora, Moreno, Quilmes, Tres de Febrero y Mar del Plata (Buenos Aires), en Resistencia (Chaco), en Córdoba Capital y en Granadero Baigorria (Santa Fe). Hasta ahora se sumaron 840 camas de terapia e internación, 276 respiradores y 24 ventiladores de transporte.
“Este equipo de trabajo, que se armó entre estudiantes, docentes y técnicos del HEC, ya pasó por los modulares de Hurlingham, Florencio Varela, Moreno, Quilmes, Almirante Brown y Lomas de Zamora. En mi opinión, la participación en conjunto de los estudiantes de Bioingeniería de la UNAJ con el Hospital El Cruce fue y es fundamental para lo que es la puesta en marcha de los equipos médicos de estos centros”, comenta Franco Ornatovich, técnico del área de Ingeniería Clínica del Hospital El Cruce y estudiante de Biotecnología de la UNAJ.
Estudiantes contratados para asistir en los hospitales
Ante la necesidad surgida en algunos hospitales modulares, vinculada a la asistencia en el funcionamiento y que los equipos sean utilizados de forma adecuada, desde el Hospital El Cruce se gestionaron contratos para que tres estudiantes de Biotecnología de la Universidad Arturo Jauretche trabajen en distintos centros. Así, de lunes a viernes de 9 a 15, Maia Caballero supervisa y colabora en el centro modular de Florencio Varela, Ulises Romero hace lo suyo en el modular de Quilmes y Christian Gaetán en el modular de Almirante Brown.
Desde la llegada del COVID-19 a nuestro país, desde la UNAJ se asumió el compromiso de generar y transferir conocimiento para el desarrollo de elementos de diagnóstico, preventivos y paliativos, como así también el acompañamiento de diversas políticas y acciones dispuestas por el estado nacional, provincial y municipal.
Voluntarios por todos lados
Casi 3.000 alumnos de universidades nacionales del conurbano bonaerense se sumaron como voluntarios a los equipos de salud que realizan testeos para detectar casos sospechosos de coronavirus en esa zona y en el interior de la provincia de Buenos Aires, informó el Ministerio de Salud de la Nación.
Entre ellos se destacan los de la Universidad Nacional Arturo Jauretche. Arnaldo Medina, secretario de Calidad en Salud de la cartera sanitaria nacional, explicó que la incorporación es oportuna en el momento en que aumentan los casos de coronavirus en la región del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), en declaraciones a Radio Provincia.
Explicó que el objetivo es “para trabajar en los testeos que se están haciendo a través de los rastrillajes en los barrios del conurbano como en el seguimiento de contactos estrechos” de personas con diagnóstico confirmado de la enfermedad.
“En cualquier barrio del conurbano se encuentran voluntarios de las universidades nacionales, incluso alumnos superiores de carreras como medicina, técnicos en emergencias y desastres y enfermeros que por ejemplo están hisopando” a personas con síntomas en los rastrillajes comunitarios, dijo.
La inclusión de estudiantes universitarios de carreras vinculadas a la salud en la prevención de la Covid-19 fue consensuada entre los ministros de Salud y de Educación, Ginés González García y Nicolás Trotta.
Al convenio firmado entre los funcionarios para incorporar estudiantes de los años superiores de las carreras adhirieron varias universidades nacionales.
Consultado acerca de la decisión del Gobierno nacional de retornar a la fase 1 del aislamiento obligatorio, el funcionario aclaró que “lo que se busca es aplanar la curva, que hoy está en una franca aceleración”
“Si uno la deja crecer al ritmo que estamos, en dos o tres semanas vamos a estar en problemas”, dijo y añadió que “hoy hay un indicador que tiene cada vez más peso, que es la ocupación de camas; tenemos margen, no estamos con desbordes, pero sí tenemos que prever no llegar a una situación de desborde”.
Señaló que el aumento de la circulación “de la población es lo que hace que también aumente la circulación del virus”, por lo que consideró “fundamental lograr la adhesión de la población para que no se produzcan encuentros que permiten propagar la enfermedad”.
Medina aseguró que “indudablemente habrá un paso atrás, pero hay que sacar el dramatismo en eso de cerrar todo o abrir todo”.
Consultado sobre declaraciones del ex secretario de Salud, Adolfo Rubinstein, acerca de que el Gobierno nacional no dispuso acciones territoriales para prevenir el coronavirus, Medina dijo que “no le resultan serias viniendo del responsable de devastar la Atención Primaria de Salud”.
“Se han visto las imágenes en varios medios de camiones y móviles que estaban sin ponerse en marcha, abandonados hace cuatro años. ¿Qué pasaría si siguieran abandonados los hospitales del conurbano?, se preguntó.
Destacó que pondrán en funcionamiento «cuatro hospitales en la provincia de Buenos Aires, dos en La Matanza», que se puso en marcha uno en Esteban Echeverría y otro lo hará en Ituzaingó en las próximas semanas.
Además, resaltó que el hospital de «Cañuelas que estaba a una capacidad del 25%» llegó al 100% «con 180 camas disponibles: eso es gran parte del margen que hoy tenemos, y que el gobierno anterior había abandonado”.