Axel Kicillof lo hizo oficial y se juega a todo o nada: la provincia de Buenos Aires tendrá sus propias elecciones el próximo 7 de septiembre. El gobernador bonaerense anunció este lunes el desdoblamiento del calendario electoral y presentó un proyecto de ley para suspender las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), en medio de una fuerte crítica contra el gobierno de Javier Milei y sus reformas políticas.
La decisión se dio a conocer en una conferencia de prensa en La Plata, junto a la vicegobernadora Verónica Magario y un grupo de intendentes peronistas del conurbano, entre ellos Julio Alak (La Plata), Mario Secco (Ensenada), Fabián Cagliardi (Berisso) y David Angueira (Punta Indio). También estuvo presente el diputado provincial Carlos “Cuto” Moreno y gran parte del gabinete bonaerense, aunque llamativamente se ausentaron los funcionarios que responden a La Cámpora, lo que alimentó versiones de cortocircuitos internos.
Durante su discurso, Kicillof cargó con dureza contra el presidente Milei por sus medidas económicas: “Nuestro pueblo la está pasando muy mal y el gobierno nacional no da respuesta. Se perdieron 400.000 empleos, no se cuida la industria nacional y se intenta imponer un sistema electoral nuevo, sin consultar ni planificar”.
El mandatario explicó que su decisión de desdoblar las elecciones provinciales se basa en “una evaluación seria” que busca garantizar un proceso ordenado, transparente y centrado en el derecho de los bonaerenses a votar sin obstáculos. “Firmé un decreto para que las elecciones en la provincia se realicen el 7 de septiembre”, confirmó.
Además, criticó la implementación de la Boleta Única Papel (BUP) y el intento de eliminar las PASO. “Votar el mismo día con dos sistemas distintos sería un caos. Hicimos simulaciones y el resultado es inviable. Es una trampa que puede impedir que muchos ciudadanos emitan su voto correctamente”, remarcó.
Kicillof sostuvo que presentará un proyecto del Ejecutivo para suspender las primarias en la provincia y pidió que el tratamiento legislativo sea rápido. “No podemos exponer a nuestra gente a un proceso electoral caótico, con colas eternas y confusión. Esta decisión es pensada y necesaria”, enfatizó.
También aclaró que no será candidato, pero que el oficialismo bonaerense “militará ambas elecciones con intensidad total para que el ajuste y la motosierra no entren a la provincia de Buenos Aires”.
Finalmente, lanzó un mensaje hacia el interior del peronismo y las fuerzas opositoras a Milei: “Vamos a seguir trabajando por la unidad. La provincia no se vende. Defender Buenos Aires es defender el proyecto nacional”, cerró el gobernador.