Con el objetivo de vincular a empresarios pymes con privados de libertad, se desarrolló un encuentro en una de las cárceles de Florencio Varela, que contó con la coordinación del Servicio Penitenciario Bonaerense y religiosos.
Todo ocurrió el jueves pasado en la Unidad 24 donde un grupo de empresarios, integrantes de la Red Inclusiva para la Expansión Laboral (RIEL), donde compartieron una charla, compartieron un acto de entrega de certificados y culminó con partido de fútbol.
El pastor evangélico y arquitecto Héctor Santojanni y el representante de la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires y religioso católico Federico Cuomo, junto a la Subdirección General de Trabajo Penitenciario del SPB, organizaron la jornada para que varios empresarios desmitifiquen la vida carcelaria y se relacionen con los internos.
En la Unidad 24, en el módulo D1, los internos reciben capacitaciones en cursos informales de formación de oficios: herrería, construcción en seco, electricidad, pintura y hasta en inglés. Y en la ocasión se entregaron 60 certificados.
El subjefe del SPB, Horacio Falcone, quien acompañó el encuentro, afirmó que “la idea fue que los empresarios se vinculen con los internos para que una vez que logren la libertad puedan acceder a un trabajo”.
En el SUM del establecimiento penal, el Jefe del Complejo Penitenciario Florencio Varela, Hugo Piedrabuena, dio la bienvenida a los empresarios y resaltó, “la capacitación y el trabajo, junto a la educación son los pilares fundamentales de la resocialización”.
Luego el Subdirector General de Trabajo Penitenciario Penitenciario, Daniel Mugica, expresó: “Capacitar es desde todo punto de vista muy positivo, pero –dirigiéndose a los empresarios, dijo – es muy importante que afuera alguien los recepcione, sin estigmatizaciones”.
Santojanni es el Presidente del Ministerio Carcelario por el Cambio Interno, y destacó: “Esto que estamos viviendo hoy, y que tenemos que agradecer a Dios, se da entre otros aspectos gracias a un cambio de mentalidad de las autoridades actuales, hace 20 años que estamos viniendo a las cárceles y es la primera vez que se nos abren las puertas de esta manera”.
Por su parte Federico Cuomo, dirigente de RIEL, que es un espacio interdisciplinario e interreligioso que convoca a los empresarios pymes a trabajar siguiendo los principios que el papa Francisco volcó en la encíclica Laudato Si’, y que fue quien acercó a los empresarios hasta la Unidad subrayó: “Soy dirigente empresario desde hace casi 20 años, hace once conocí a la gente del MCCI (Ministerio Carcelario para un Cambio Interno) y me siento orgulloso de colaborar con ellos y con el servicio penitenciario tendiendo puentes de ayuda hacia quienes más lo necesitan, nos preocupa que el interno tenga una oportunidad cuando salga y la idea es que ustedes como empresarios que son, puedan traer trabajo a la cárcel” y destacó al empresario Fernando Aboy que consiguió la donación de cueros y una máquina de coser para la fabricación de indumentaria.
Acompañaron además el director de Promoción e Inclusión Sociolaboral del SPB, Marcos Di Lorenzo, el director de la Unidad 24, Sebastián Romero y la jueza de Ejecución de Quilmes, María Juli Márquez.
Antes de pasar al campo de deportes de la Unidad, donde se disputó el esperado partido de fútbol, revancha de uno realizado tiempo atrás, el jefe de Unidad Sebastián Romero obsequió a Santojanni y a Cuomo tablas para cortar carne realizadas y talladas por los internos en el taller de carpintería.
Finalmente y como estaba previsto se desarrolló el match deportivo en un clima de alegría y camaradería en donde el resultado fue anecdótico y que finalizó con un tercer tiempo al mejor estilo rugbiers donde penitenciarios, empresarios, invitados e internos compartieron un gran almuerzo.