La abuela Reyes, tiene cuatro nietos a cargo, padece una enfermedad y clama para que la ayuden antes de ser operada: “Quiero entrar al quirófano sabiendo que ellos están bien y en un lugar digno”.
Reyes Escalante, tiene 59 años, vive en la calle 527 N° 2234 de Villa Argentina, en Florencio Varela, en una humilde vivienda que construyó junto a su marido hace ya 32 años.
Allí ente las calles 544 y 546 crió a sus 7 hijos y vio crecer al barrio. En la zona es conocida como la “Señora de Guido”; todos los conocen como una familia de bien y ahora se preguntan por qué el Estado (Asistente Social del Centro de Salud, Desarrollo Social, Escuela Primaria, Justicia) está ausente en su necesidad.
“Dicen que Dios pone pruebas a sus mejores guerreros”, pero en el caso de Reyes Escalante son sus hijos, nueras y nietos los que le dan fuerzas para continuar mirando hacia adelante.
Cinco años atrás fue el primer gran golpe para Reyes. Su hija dejaba este mundo y sus dos pequeños (Damián y Kevin) pasaban a ser responsabilidad de la señora Escalante. Luego en el 2018, un diagnóstico de cáncer la golpeó golpeo nuevamente, pero no la tiró. Pero a esta vecina le faltaba aún más, ya que mientras en febrero realizaba los tratamientos de rayos para su enfermedad, otra de sus hijas abandonaba el hogar familiar dejándoles a sus pequeños de 4 y 7 años.
Hoy la mujer que superó para tratar el cáncer 33 sesiones de rayo, 2 de quimioterapia, que enfrenta a diario el asecho de la diabetes y la anemia, aguarda a que los médicos de PAMI de la Clínica Santa Clara ( Bernal) le confirmen la fecha de operación, ya que la prótesis se encuentra disponible para ella. “Necesito que protejan a mis nietos. La madre los dejó y yo no quiero que ellos sufran más o que me los saquen y los dejen por ahí” llorando clamó Reyes.
Mientras la fecha de operarse llega, Reyes busca ayuda para sus cuatro nietos. Ellos viven y estudian gracias al esfuerzo de su abuela. Quien con una mísera pensión de 6000 pesos, hace peripecias para darle lo mejor que puede.
Hoy Reyes necesita muchas cosas, desde tramitar documentación de identidad, las AUH para los niños de 4 y 7 años, y que la justicia de menores agilice los pasos para entregarle la guarda a ella de los pequeños.
Además el intentar acondicionar su vivienda, una habitación antigua de ladrillos comunes y techo de fibra cemento, lugar que no se encuentra en condiciones para su recuperación post operación.“Necesito que me operen para poder continuar viviendo y criando a mis nietos. Ellos necesitan que yo esté recuperada, pero si no tengo una habitación en condiciones peligra mi operación y el futuro de ellos” contó entre lágrimas a INFOSUR.
“Quiero que protejan a mis nietos. La madre los dejó, se fue el 22 de febrero y yo no quiero que ellos sufran más, que venga un día y los deje por ahí o que me los saquen” llorando clamó Reyes.
Indocumentados y sin la AUH
Según narró Escalante, sus nietos más pequeños se encuentran indocumentados, ya que en febrero cuando su madre los abandono, ella se llevó consigo los DNI y las tarjetas de beneficiario de los programas que cobraba. “Ella se llevó todos los documentos de los nenes de 4 y 7 años. Yo pude inscribirlos en la Escuela y Jardín porque les expliqué la situación, pero no puedo llevarlos al médico, ni tramitar nada sin sus DNI” comentó la mujer.
Asistente social de Villa Argentina brilla por su ausencia
Al ser consultada sobre si recurrió a la asistencia social, Reyes Escalante comentó que su hija – la que abandonó a sus nenes- había concertado una entrevista con la asistente social de la Salita de Villa Argentina y que esta “ vino dos días después de que mi hija se fuera”. “La atendí y le comenté que se había ido abandonando los nenes, y esta mujer me dijo avíseme cuando regrese. Desde febrero que nunca más nos visitó la asistente social de la sala. Ella sabe la situación mía y de mis nietos, y al parecer no le importa” argumentó la vecina con lágrimas en sus ojos.
“Necesito que protejan a mis nietos. La madre los dejó y yo no quiero que ellos sufran más o que me los saquen y los dejen por ahí” llorando clamó Reyes.
Muchas necesidades
“La casa se inunda, se llueve, vivimos los nenes y yo todos juntos en una pieza. No pude revocarla, ni mejorarla porque no me alcanza” esgrimió la mujer que en unos meses debe ser operada, y que para su recuperación necesita prioritariamente un lugar digno de recuperación.
“Mis hijos me dan una mano, pero no pueden construirme una habitación con un baño, por eso le pido al intendente, a gente de desarrollo social que venga a ver cómo vivimos y que nos den una ayuda” expresó la vecina junto a sus cuatro nietos, cuyas edades van de los 4 a los 10 años.