En un fin de semana récord de muertes por coronavirus en Florencio Varela, el sábado hubo trece fallecidos, hubo férreos controles para lograr que se respeten las normativas de aislamientos dictados por el gobierno nacional para la zona, que dejaron cuatro detenidos, diez clausuras en unas catorce intervenciones protagonizadas por la comuna y la policía.
En la primera de las intervenciones, según informaron voceros policiales a Infosur, se procedió a desactivar una reunión familias que superaba las 30 personas, en jurisdicción de la comisaría segunda sobre la calle Franklin al 400. En tanto, sobre la calle Gardel en territorio de la comisaría tercera, se desarticuló una fiesta clandestina. En el barrio Ingeniero Allan, se intervino en un comercio del rubro almacén que estaba abierta fuera del horario establecido.
En tanto, en pleno centro de Florencio Varela, un reconocido local gastronómico fue clausurado y notificado por la ausencia de protocolo. POr otra parte, también se cerró el templo de una iglesia que realizaba un oficio religioso con más de 30 personas en el interior.
En igual sentido, se informó de la detención de cuatro jóvenes de entre 18 y 23 años que no pudieron justificar su presencia en la vía pública.
Frederic dijo que 6.300 efectivos controlan restricciones y secuestraron 2 autos en dos días
«El primer día no tuvimos infraccionados y el día de hoy tuvimos dos vehículos secuestrados y dos personas con un inicio de causa penal en la autopista Ricchieri, por la que debió intervenir la justicia federal», dijo Frederic en declaraciones a Télam, donde también consideró que los controles «son básicamente disuasivos o preventivos para que la gente no viaje sin permisos o que regrese a su casa».
Frederic explicó que unos 500 efectivos de las cuatro fuerzas de seguridad federales participan en los puestos fijos dispuestos en los accesos a la ciudad de Buenos Aires, pero que hay otros 4.000 efectivos que se encuentran patrullando distintos distritos del Gran Buenos Aires y otros 1.800 que realizan los controles en toda la red ferroviaria metropolitana.
Según el balance de la ministra «se está viendo bastante acatamiento» por parte de la sociedad a las medidas dispuestas por el Gobierno nacional para evitar la propagación del coronavirus, «ya que fueron solo dos vehículos secuestrados en nueve puntos de control, así que evidentemente la gente se está cuidando».
«El espíritu del decreto es cuidar a la gente, no tiene un fin punitivo excepto para las personas que no entiendan que se trata de cuidarla y de cuidar a los demás», explicó la funcionaria nacional en una entrevista con Télam.
Tras una reunión realizada el jueves pasado con los jefes de las cuatro fuerzas federales de seguridad, Frederic ordenó que se realicen controles fijos en los accesos a la ciudad de Buenos Aires para garantizar la restricción a la circulación entre las 0 y las 6 de la mañana.
Según el cronograma dispuesto, la Policía Federal Argentina desplegó a sus efectivos en el Puente La Noria, en el Camino de la Ribera y en la Autopista Panamericana (peaje ramal Tigre).
En tanto, la Gendarmería Nacional se instaló en el Acceso Oeste (peaje Ituzaingó); peaje Dock Sud y en la Autopista Panamericana (peaje ramal Pilar).
Por su parte, la Prefectura Naval realiza los controles en la Autopista Panamericana (peaje del ramal Campana), en el Puente Pueyrredón y en el Puente Avellaneda.
La Policía de Seguridad Aeroportuaria controla el tránsito vehicular en la Autopista Richieri, en el peaje Mercado Central.
En los puentes, además de los controles vehiculares, las fuerzas de seguridad realizaron tareas de control en el transporte público, donde solicitaron a los pasajeros la posesión regular y actualizada de las autorizaciones correspondientes para realizar ese tipo de viajes.
«Estamos también realizando controles aleatorios en el Gran Buenos Aires, donde hay cuatro mil efectivos de Gendarmería, de Prefectura y de la Policía de Seguridad Aeroportuaria en 31 distritos, donde hacemos controles en el transporte público para garantizar que la gente que viaja lo haga con su permiso y que no viajen más de 10 personas paradas en cada colectivo», dijo la ministra.
Frederic explicó que los efectivos que participan de los controles «tienen una indicación enfática» para que sean «disuasivos, pedagógicos o preventivos» aunque son tomados «de buena manera» por la gente.
«Vamos a seguir estando en los controles de grandes accesos y contamos también con la responsabilidad de la gente. Hay que decir que la cantidad de contagios, no solo en números, es alarmante, sino que también hay mucha gente contagiada alrededor de cada uno de nosotros y eso hace que a la gente la hace tomar conciencia», dijo.
Además, explicó que «la gente toma bien los controles» y agregó: «Le dimos una indicación enfática a los jefes de las fuerzas porque entendemos que las personas están impacientes o intolerantes con la situación que se está viviendo y eso hace que el personal policial deba ser más cuidadoso, más prudente, más respetuoso y más tolerante que hace un año».
«La ciudadanía es consciente de que se tiene que cuidar», finalizó la ministra.