El primero en llegar a Cañuelas no fue precisamente un intendente, sino un candidato. A Juan José Mussi le gusta la puntualidad y hace de ello una bandera en Berazategui. Guarecido en el Concejo Deliberante donde quiere quedar en el bronce, Mussi padre empezó a fines del año pasado a levantar cabeza, después de que el escándalo lo rozara cuando el juez Luis Armella quedó salpicado por las obras del saneamiento del Riachuelo. El “Dr.” Mussi como le gusta que lo llamen, era por ese entonces el Ministro de Medio Ambiente del gobierno de Cristina Kirchner. Enojado con el kirchnerismo más duro, su hijo se mostró por todos lados y hasta amenazó con ser candidato a gobernador. No pudo o no le dio.
Recorrió delicadamente la gran mesa con fiambres y todos buscaban a su hijo Patricio. Pero el intendente no fue. Desde que se conoció que el autor de las fotocopias de los cuadernos estaba contratado con su auto en la municipalidad que dirige, prefirió el ostracismo. Es más, las fotos de prensa de la comuna lo muestra a Juan José prácticamente como intendente. Por ejemplo, cuando todo el distrito se quedó sin agua por la rotura de un caño maestro, quien apareció en las fotos supervisando las tareas fue padre y no hijo. Desde ese entones que Patricio le viene quitando el cuerpo a las tertulias partidarias.
La cita era a las 18 pero varios llegaron un poco después, desde los Tribunales de Comodoro Py adonde fueron a acompañar a Cristina Fernández en el primer día del primer juicio que la tiene como acusada.
Entre ellos Fernando Gray, presidente del PJ bonaerense que tiene asistencia perfecta. De hecho el viernes pasado estuvo con varios de los intendentes en Lomas de Zamora en un almuerzo organizado por Martín Insaurralde del que participaron Alberto Fernández y Máximo Kirchner y el martes estuvo en Caras y Caretas para acompañar a Fernando Espinoza en la presentación de su libro. Fue como un contrapunto entre el lomense y los líderes políticos de La Matanza, Espinoza y Verónica Magario que a cambio de no haber sido invitados por Insaurralde dieron un lugar especial a Axel Kicillof en su acto. Todos ellos, se sabe, aspiran a ser candidatos a gobernadores.
El anuncio de la fórmula presidencial del peronismo, con Cristina Kirchner acompañando como candidata a vice a Alberto Fernández, ordenó el tablero a nivel nacional y fue el disparador que aceleró las gestiones para resolver la ingeniería electoral en la provincia de Buenos Aires.
Envalentonados con el «renunciamiento» de Cristina y por ende con el repliegue del kirchnerismo en el armado nacional del peronismo, ahora los intendentes buscarán hacer lo propio para desplazar al ex ministro de Economía Axel Kicillof, el favorito de la ex mandataria y quien mejor se encuentra posicionado a la luz de las encuestas.
En declaraciones a radio La990, Fernando Gray, cada vez más creído como un Varón del Conurbano, volvió a la carga con la idea de que sea un intendente el que asuma el desafío de la candidatura, y no Kicillof.
«Somos los que estamos todo el día en el territorio, conocemos nuestros distritos, la provincia. Tenemos experiencia en la gestión. Aspiracionalmente nos gustaría que un intendente sea en esta oportunidad el gobernador. Estamos trabajando en ese sentido», aseguró.
Los nombres que más suenan entre los intendentes son los de Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) y Verónica Magario (La Matanza).
El jefe comunal de Esteban Echeverría también se mostró confiado en que el peronismo podrá recuperar en las próximas elecciones «una cantidad importante de municipios del conurbano y del Interior» que hoy están en manos de Cambiemos.
En la misma línea que Gray, el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis, dijo en declaraciones a radio Cooperativa que «un intendente le vendría muy bien a la provincia», y mencionó los nombres de Magario e Insaurralde.
Otro de los que se anotó con intenciones de ser precandidato a gobernador es el intendente de San Antonio de Areco, Francisco Durañona, quien señaló en radio La990 que a su gusto «sería ideal» que las candidaturas se dirimieran en las PASO, y que si se sumara el Frente Renovador de Sergio Massa, «mucho mejor».
«Soy uno de los precandidatos, el único que representa al interior. La agenda del interior es vital para representar a un 14 por ciento del electorado nacional. Nuestro espacio le ha dado la espalda sistemáticamente y así le ha ido en las últimas elecciones», subrayó.
Sin embargo, reconoció que Kicillof es un «candidatazo» por su «instalación» y que eso es «indiscutible».
«Acá no es una lucha de vanidades para ver quien se queda con el premio mayor. Sería un error nuestro estar pegándonos codazos», concluyó.
Según supo NA, durante la reunión en Cañuelas los intendentes también comenzaron a hablar sobre la conformación de las listas para la Legislatura bonaerense.
En Cañuelas esta vez el lema fue: «Es con todos», como señal de que más allá de las definiciones de candidatos tienen que ir juntos detrás de la fórmula Fernández-Fernández y contra Cambiemos.
Todo esto regado con un exquisito plato: cazuela de pollo. El postre también fue variado para incluir todos los gustos: brownie, torta tatín y flan. Hubo premio por la asistencia: Gray les entregó un mate con el escudo del Partido Justicialista. Aunque no se conoció quién lo ganó se supo que Andres Watson de Florencio Varela estuvo entre los firmes candidatos puesto que no faltó a ninguna de las cumbres de jefes comunales. Es más, una se hizo en su distrito.