Innumerables temas folklóricos repasan los detalles de uno de los momentos màs sublimes de nuestra cultura popular. El carnaval. Y precisamente el Carnaval del Norte. La Pomeña es quizàs la màs conocida. Aquella mítica mujer, Eulogia Tapia, la coplera y su historia verìdica de noches de carnaval que inmortalizara el “Cuchi” Leguizamòn con letra del inolvidable Manuel J. Castilla.
La pintura de las noches carnavaleras es una verdadera postal de lo que se vive en esa regiòn. Y esa tradicional celebración tendrá su réplica en Florencio Varela. Esta edición se llevará a cabo en el histórico museo Guillermo Enrique Hudson, situado en calle 1356 (El Zaino) y Avenida Hudson, el sábado 17 y domingo 18 de febrero a partir de las 10hs. Cabe aclarar que la misma será suspendida en caso de lluvia.
Los carnavales del norte argentino son destacadamente diferentes de los celebrados en otras regiones del país debido a las curiosas ceremonias que combinan danza, música e intervenciones sobre la madre tierra donde se realiza el desentierro y entierro del diablo de carnaval o Pujllay.
Éste está representado por un muñeco que simboliza la liberación de los deseos reprimidos. Es por tanto una especie de dios de la celebración y la lujuria. Durante el carnaval todos pueden ser «Pujllay”, que significa «juego, baile o alegría».
Los visitantes podrán disfrutar de una jornada repleta de danzas, música en vivo, comidas típicas y regionales del norte argentino, stands de productores fruti-hortícolas y artesanías que forman parte del IDEL, dulces artesanales, plantas nativas y talleres con entrada gratuita.
El cierre de esta jornada festiva estará a cargo de la Escuela de percusión Latinoamericana «Caja de Resonancia», que deleitará a los vecinos con los sonidos autóctonos del Norte Argentino.
