Florencio Varela, nuevamente escenario de un acto delictivo que estremece a la comunidad. En esta ocasión, una abuela de 85 años, viuda y residente de la zona de Aristóbulo del Valle y Almirante Brown, sufrió el asedio de cuatro delincuentes armados en su propio hogar.
La víctima, cuya identidad preservamos, se encontraba en su vivienda cuando los malvivientes irrumpieron en el lugar, arrebatándole no solo sus ahorros en pesos, sino también cinco armas de fuego: dos Magnum 357, una Magnum 44, un subfusil, un revólver calibre 38 y una pistola. Las armas, dijeron los informantes, pertenecerían al hijo que se dedica a la colección.
La abuela en estado de shock
El asalto, que tuvo lugar durante la madrugada, dejó a la abuela atónita y vulnerada en su propio refugio. Los criminales, tras consumar el robo, se dieron a la fuga rápidamente en un vehículo blanco, sumiendo a la víctima en la angustia y el temor.
Este lamentable suceso pone de manifiesto la cruda realidad de la inseguridad que persiste en Florencio Varela, afectando particularmente a los sectores más vulnerables de la sociedad. Los abuelos, en muchos casos, son blanco de estos actos delictivos, dejándolos no solo con pérdidas materiales, sino también con secuelas emocionales difíciles de superar.
¿Y la policía? Nada
Ante esta situación, los vecinos de la zona exigen respuestas y medidas concretas por parte de las autoridades locales. La violencia indiscriminada no puede seguir ganando terreno en nuestra comunidad, y es imperativo que se refuercen los operativos de seguridad y la presencia policial en áreas críticas.
En este contexto, la solidaridad vecinal se hace fundamental. La unión de la comunidad para abogar por su seguridad y la implementación de estrategias integrales son clave para frenar esta ola delictiva que aqueja a Florencio Varela. La vida y la tranquilidad de nuestros abuelos no pueden seguir siendo moneda de cambio en manos de la inseguridad.