La organización Proyecto Galgo Argentina (PGA), una de las principales impulsoras del proyecto de prohibición de las carreras de canes que fue convertido anoche en ley por la Cámara de Diputados, celebró la sanción de esta norma y aseguró que «los galgos dejaron de ser invisibles».
Tras un álgido debate que fue acompañado por incidentes en los exteriores del Congreso entre proteccionistas y galgueros, la Cámara de Diputados convirtió en ley el proyecto para prohibir las carreras de estos perros en todo el territorio argentino.
La norma castiga con penas de hasta 4 años de cárcel y multas de hasta 80.000 pesos a quien realice, promueva u organice la actividad.
La iniciativa fue respaldada por 132 votos del interbloque de Cambiemos, el massismo y el bloque justicialista y la izquierda, mientras que el rechazo fue impulsado por 17 legisladores, algunos representantes del Frente para la Victoria, y el diputado salteño Alberto Olmedo.
«El sueño de miles de galgos, de miles de activistas que lucharon siendo su voz, es hoy una realidad consumada», dijeron en un comunicado publicado en la plataforma Change.org, donde el petitorio para que se aprobara esta norma sumó más de 400.000 firmas.
«Los galgos dejaron de ser invisibles. Los galgos fueron puestos en la agenda de gobierno gracias a la acción ciudadana», dijeron.
En diálogo con radio Delta, la referente de la organización, Inés Sánchez aclaró que “de acá a 10 días, si no media un veto del Poder Ejecutivo, no se van a poder realizar más carreras de perros” e invitó a la ciudadanía a realizar la denuncia policial en caso de que, transcurrido ese plazo, los galgueros sigan con esta práctica.
“La gente, donde se entere que hay una carrera, puede llamar a policía, que tiene que actuar, porque se estará cometiendo un delito”, dijo.
Sánchez explicó que en la actualidad las carreras de galgos se realizan en “15 provincias” y sostuvo que “en algunas es impresionante” la magnitud de la actividad, como en Córdoba, donde “cada localidad tiene un pequeño o gran canódromo”.
Al momento de describir el maltrato animal al que, asegura, son sometidos la mayoría de los perros, la activista habló de “cría indiscriminada” a partir de “poner a las perras a reproducirse todo el año, acelerando el celos con drogas” para generar una “superpoblación” donde sea posible una mejor selección.
Además detalló que se produce una tasa de descarte de entre el 50 y el 70 por ciento al momento del nacimiento; duros entrenamientos; hacinamiento; y tratamientos “con infinidad de drogas, como estricnina, cocaína, metanfetaminas y esteroides”.
Tras denunciar las “impresionantes” agresiones sufridas ayer por los activistas en manos de los galgueros, Sánchez afirmó que la «pasión» de los galgueros “es por los billetes, porque se mueven millones cada fin de semana en apuestas, en juegos, en premios y en venta de tratamientos con drogas en cada canódromo».
«No es un deporte porque no está considerado así por la Confederación Argentina de Deportes, y si alguien quiere trabajar que se busque un trabajo digno que no implique usar un animal, entrenarlo, drogarlo y después, cuando no sirve, en la mayoría de los casos, tirarlo”, concluyó.
Desde PGA advirtieron, además que seguirán luchando «no sólo por los galgos, sino por diversas causas» referidas al cese de todo tipo de maltrato animal.