La atleta berazateguense Miriam Cao volvió a dejar su huella en la competencia más austral del mundo. El pasado 9 de marzo, participó por quinta vez en la maratón de las Islas Malvinas, donde fue la única argentina en la carrera y logró un destacado sexto puesto en la categoría general.
A pesar de las adversidades físicas, Cao se sobrepuso a una fractura de tobillo y, en apenas 30 días, preparó su cuerpo para enfrentar los 42 kilómetros en un terreno hostil, con fuertes vientos y temperaturas extremas. «Malvinas y la soberanía pueden más que cualquier otra cosa», expresó emocionada tras completar la carrera.
Un desafío físico y emocional en malvinas
Miriam, quien reside en Berazategui desde hace 10 años, no solo llevó el orgullo de su ciudad sino también la bandera de la reivindicación soberana. «Vine a Puerto Argentino, nuestra Tierra Santa, a representar a mi patria chica: Berazategui. Estoy feliz y agradecida de haber podido completar la maratón en nuestras Malvinas», declaró.
La competencia contó con la participación de 120 corredores y, a pesar de las duras condiciones climáticas, Miriam logró finalizar la prueba con un tiempo que incluso la sorprendió. «El viento superaba los 80 kilómetros por hora, hubo lluvia y granizo, pero nada de eso me importó. En mi corazón siempre estuvieron las banderas de Argentina y de Berazategui», afirmó.
Una causa que trasciende el deporte
Más allá de la hazaña deportiva, la maratonista destacó la importancia de continuar con la lucha por la soberanía de las Islas Malvinas. «Amo mi patria, amo Malvinas y reivindico a los veteranos de guerra, como mi hermano, que estuvieron allí. Es una causa que me une más a Berazategui, donde el intendente Juan José Mussi ha impulsado una fuerte política de memoria y reconocimiento a los héroes de Malvinas», resaltó.
Cao enfatizó que en su ciudad natal se vive la causa Malvinas con orgullo: «Hay monumentos, murales y actos todo el año. Mussi entiende el amor por Malvinas y la soberanía, y eso es maravilloso».
Rumbo a 2026: una promesa firme
La atleta ya tiene la mira puesta en el futuro. «Correr en las Islas requiere un año de preparación. Sé que me enfrentaré nuevamente al clima hostil, pero tengo claro que en 2026 una mujer volverá a representar a Berazategui y a la soberanía en Malvinas. Y esa mujer seré yo», concluyó con firmeza.