Al llegar la época veraniega, la gente comienza a preocuparse por el físico, porque lo mostrarán en las playas o piletas, o porque pasarán sus vacaciones en un destino turístico alejado y quieren tener la seguridad de sentirse bien.
No deja de ser importante que nos preocupemos con ese tema. Sin embargo, la atención con el físico y , principalmente, con la salud, debería ser una tarea continua, no sólo durante los meses de calor. Si se tiene un cuidado permanente, no habrá que preocuparse en cómo nos quedará la malla en el verano!
Algunos cuidados básicos nos llevarán a estar bien:
– Chequeos médicos. Visitar al médico de cabecera, quien seguramente indicará exámenes sanguíneos para corroborar que esté todo en orden y controlará la presión arterial. De acuerdo al sexo y a la edad, derivará a otras consultas de control.
– Ejercicio físico. Fundamental para la salud, el poner el cuerpo en movimiento es la clave principal para estar bien de cuerpo y alma. No hace falta ir a un gimnasio todos los días: si no te gustan los gimnasios o los deportes, basta con que salgas a caminar diariamente 20 minutos! Eso sí: sin cargar peso y usando zapatillas confortables para cuidar las articulaciones.
– Hidratación. Debemos hidratarnos constantemente, no sólo cuando hace calor. Estudios científicos indican que, cuando se tiene sed es porque estamos comenzando a deshidratarnos. Por lo tanto, beber líquidos, principalmente agua, es muy importante. Lógicamente, durante los meses veraniegos, las altas temperaturas llevan al cuerpo a transpirar y, por ende, a deshidratarse más rápidamente. Es por ese motivo que se bebe más durante el verano. Pero no debemos descuidar ese ítem durante el invierno, porque estaremos ayudando siempre a nuestros riñones a trabajar saludablemente.
– Alimentación. Ítem muy importante para los 12 meses del año! Mantener una alimentación saludable regularmente hará que la salud y el físico estén siempre en sintonía. Para eso, lo recomendable es tener a mano recetas de comida saludable, para armar un menú variado que pueda sostenerse –y disfrutarse– a lo largo del tiempo. Es sabido que las frituras, las grasas y el sodio en exceso causan problemas a la salud, además del impacto en cuanto a los kilos: colesterol alto, triglicéridos altos, hipertensión arterial, son las consecuencias de una dieta sin control y sin calidad.
– Entretenimiento. Un factor que muchos olvidan de agregar a los consejos para una buena salud. El tener momentos de diversión y esparcimiento libera a la mente y al cuerpo de tensiones producto de la rutina diaria. Ir al cine, tomar un café con los amigos, pasear por un parque, salir a jugar con los hijos, son algunas de las actividades recomendadas para liberar el estrés y regresar a casa bien dispuestos y con energía para enfrentar un nuevo día con buen humor!
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