A tres meses del crimen de Lautaro Morello y la desaparición de su amigo Lucas Escalante en el partido de Florencio Varela, no se conocen avances en la causa y la familia del joven que aún no fue hallado aseguró que se trata de un homicidio y una desaparición cometidos por «una familia de policías en democracia» y le reclamó a la Justicia que termine con la impunidad.
En tanto, ayer a la tarde familiares, amigos y vecinos de Escalante, el joven de 26 años que aún continúa desaparecido, reclamaron en Cinco Esquinas, sobre la Ruta 53, «aparición con vida», mientras aguardan que la Policía Federal retome la investigación con fuerza.
Ahora, el fiscal Daniel Ichazo es el que interviene en la causa, aunque el expediente ya había pasado por las manos de cuatro fiscales de ese departamento judicial que, por haberse excusado o porque solo subrogaron las fiscalías por las licencias de sus colegas, se apartaron de la investigación
Según voceros judiciales, la investigación de la muerte de Morello (18) y la desaparición de Escalante (26) el juez de Garantías de Florencio Varela, Julián Busteros, dictó la prisión preventiva el pasado 19 de enero para los detenidos Cristian y Maximiliano Centurión, sobrino e hijo respectivamente de un comisario mayor de la policía bonaerense, quienes están procesados como «coautores» del delito de «homicidio calificado por ensañamiento y alevosía».
Dicha prisión preventiva había sido solicitada previamente por la fiscal Mariana Dongiovanni, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 descentralizada de Florencio Varela, quien luego pidió ser excusada de la causa por considerar que recibió «constantes descalificaciones» por parte de familiares de las víctimas.
Tras eso, su lugar fue reemplazado por la fiscal de feria Bárbara Velasco, quien también se excusó de la causa ya que manifestó haber colaborado con el comisario antes mencionado en causas pasadas, por lo que la investigación pasó a manos del fiscal Daniel Ichazo, de la UFI 1 descentralizada de Berazategui.
Este último estuvo a cargo del expediente hasta que, quien había salido sorteado para reemplazar a Dongiovanni, el fiscal Martín Conde, de la Unidad Funcional de Instrucción UFI 3 de Quilmes, retomó de una licencia el pasado 1 de febrero.
Ffinalmente, Conde también solicitó ser excusado del caso a través de un escrito por no poder ser objetivo tras haber recibido comentarios «calumniosos y agraviantes» por parte del abogado de la familia Morello, Carlos Diéguez, y este pedido fue aceptado por el juez Busteros. Tras idas y vueltas la causa recayó en la fiscalía de Berazategui del Dr. Ichazo.
Ayer a la tarde, familiares de Escalante, vestidos con remeras blancas y la leyenda en letras negras “Nos falta uno, nos falta Lucas”, acompañados de amigos y vecinos, realizaron una manifestación en el barrio Cinco Esquinas.
La madre de Lucas, entrevistada por el canal de noticias TN, les pidió a los dos detenidos que tiene la causa que le “digan dónde está” su hijo.
“Yo no siento que le pasó algo a mi hijo, yo siento que mi hijo tiene que estar vivo y les ruego y les suplico que me digan dónde está mi hijo”, expresó la mujer.
Por otro lado, a pedido de la Procuración General de la provincia de Buenos Aires, la Policía bonaerense fue apartada de la investigación y en su lugar está actuando la División Homicidios de la Policía Federal Argentina (PFA).
Escalante fue visto por última vez el viernes 9 de diciembre en la localidad de Bosques, partido de Florencio Varela, cuando pasó a buscar a Morello para salir a festejar el triunfo de la Selección Argentina ante Países Bajos por las semifinales del Mundial de Qatar a en bordo de un auto BMW que al día siguiente apareció incendiado.
El cuerpo semicalcinado de Morello fue hallado cerca de las 21.30 del pasado 15 de diciembre a la vera de la autopista en construcción Buen Ayre, en Guernica, partido de Presidente Perón, y nada se sabe aún de Escalante.
En tales circunstancias, fueron detenidos los Centurión, quienes quedaron vinculados al caso tras el análisis de cámaras de seguridad y de antenas de telefonía celular.
En una filmación de una cámara de una estación de servicio de Florencio Varela se ve a Cristian Centurión cerca de las 0.30 del 10 de diciembre cargando nafta en un bidón blanco que se sospecha pudo haber sido empleado para incinerar el auto de Lucas y el cadáver de Lautaro.
En este contexto, el Gobierno nacional ofrece 4.000.000 de pesos de recompensa para quienes aporten datos que permitan dar con el paradero de Lucas.