En sus incursiones por uno de los barrios más calientes del conurbano, los investigadores descubrieron una propiedad que sobresalía por su fastuosidad en la villa Sasetru de Avellaneda.
Casi en medio de la popular barriada, la casa resalta sobre las demás edificaciones y cuenta con seguridad de alambre electrificado y circuito cerrado de cámaras, similar a una mansión.
Por dentro la residencia se compone por tres plantas, cinco baños y siete dormitorios, en uno de los ellos, debajo de una de las camas, se encontraron dos paquetes embalados con 15 ladrillos de marihuana cada uno, según informaron las fuentes policiales.
En el patio interno, con ladrillos de primera y balcones similares a las de las películas, una serie de plantas correctamente dispuestas le dan a la propiedad un ambiente que se parece a Miami.
Del otro lado, sobre el frente, las luces sobre las calles disponen al ingreso a una vivienda de buen vivir. Aunque sea de forma ilegal.
La “narcomansión” de la calle Deheza al 1700 fue el objetivo principal de los investigadores y adentro se encontró 70 kilogramos de marihuana, dinero en efectivo, dos balanzas, 15 celulares, 57 municiones calibre 9 milímetros con punta de teflón, anotaciones y elementos para el fraccionamiento como cinta de embalar y papel film. Todo esto según la información policial. En la vivienda fueron detenidos tres hombres y en otro de los objetivos, otros dos, por lo que en total hay cinco detenidos, todos de nacionalidad paraguaya
La Delegación Lanús-Avellaneda de la Superintendencia de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas estuvo a cargo de los cuatro allanamientos realizados durante la madrugada en ese asentamiento y en otro llamado villa Luján.
Uno de los investigadores dijo “Los detenidos eran los proveedores de esos lugares y de otros de la zona. Aparentemente traían la droga desde Paraguay en grandes cantidades”.
La misma fuente contó que “la mansión, ubicada en el medio de la villa, tenía muchas medidas de seguridad, como alambre electrificado, circuito de cámaras y rejas”.
La causa quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 y el Juzgado de Garantías 9, ambos del Polo Judicial Avellaneda.
