Pasó un mes desde que Franco Almirón fue víctima de un brutal ataque que lo dejó al borde de la muerte después de una discusión de tránsito con Jonathan Romero, a quien aún la Justicia de Florencio Varela no logró detenerlo. Si bien cuando sucedió todo – 28 de junio- un fiscal de Quilmes actuó de oficio; en Varela ninguna fiscalía tomó el caso hasta pasados 20 días del incidente que dejó a Almirón en un hospital. Ahora y tras la insistencia de los familiares del conductor del colectivo se habría movilizado la causa, pero para darse la detención de Romero habría que aguardar la resolución de la Cámara quien tendrá que resolver la apelación del abogado del ¨conductor violento¨ que solicitó la eximición de prisión de su defendido.
Franco dejó de hablar del tema y junto a sus familiares intenta no recordar lo que vivió el viernes 28 de junio, cuando transitaba con el colectivo de la empresa San Juan Bautista y en la intersección de las calles Florida y Tres de Febrero de Villa Vatteone y fue chocado de costado por un automóvil, en el que circulaban a gran velocidad con dos hombres –uno de ellos Jonathan Romero – y una mujer embarazada.
En tanto, Natalia, hermana de Franco Almirón no quiere que el caso quede en el olvido y que el agresor de Franco pueda caminar libremente luego de lo que le causó a su familiar y contó a este medio que «por las redes sociales nos envían audios que los estamos aportando en la Justicia porque no vamos a tolerar esta situación.
En teoría el martes la Cámara último iba a expedirse con relación a la eximición de prisión y seguimos en veremos, con mi hermano en un estado de crisis emocional donde cada día que pasa es peor».
Recordemos que el fiscal Hernán Bustos Rivas solicitó la detención al juez Agüero que le fue concedida, pero la defensa de Romero apeló ante la Cámara y ahora el órgano de alzada debe pronunciarse al respecto. «Queremos celeridad de parte de la Justicia, ellos saben donde vivimos, a mi hermano lo arruinaron totalmente, tiene lesiones en el cráneo y su estado de salud es delicado», remarcó indignada Natalia
Según la versión de la familia, el chofer se detuvo porque por el impacto había reventado un neumático del colectivo y lo primero que hizo fue intentar calmar a los pasajeros, mientras constataba si se encontraban en buen estado. Luego, bajó para hablar con el conductor del auto, el cual aparentemente no tenía registro ni cédula verde, mientras que la joven embarazada fue llevada al hospital en otro auto.
Cuando Almirón dialogaba con los conductores, Romero se le abalanzó lo golpeó y pateó en el piso, provocándole lesiones que derivaron en que estuviera internado por más de dos semanas y en la actualidad con atenciones médicas diarias. «Romero dio direcciones falsas, estuvo demorado y lo dejaron ir, sospechamos que no hay intenciones de detenerlo, mientras tanto seguimos padeciendo amenazas, vivimos con miedo», sentenció la hermana del chofer.
El caso podría tener similitud con el ocurrido el pasado miércoles 10 de julio, cuando Esteban González Zablocki, oriundo de la ciudad bonaerense de Berisso, asesinó a golpes al taxista Jorge Gómez en el cruce de las calles 125 y 50 de Ensenada (zona El Dique) tras bajarse de su camioneta Volkswagen Amarok blanca y propinarle una brutal paliza al hombre de 52 años, con quien venía discutiendo por un incidente de tránsito.
El joven de 27 años comenzó a pegarle hasta tirarlo al suelo, en donde continuó agrediéndolo con piñas y patadas. Todo quedó registrado por una cámara de seguridad que permitió observar las imágenes que se viralizaron en todo el país.
