Ayer se cumplieron dos años sin Gabriela Ciuffarella. Se trata de la primera muerte resonante que enfrentó el ex presidente del Instituto Médico Obra Asistencial (IOMA) bajo la gestión de María Eugenia Vidal, Pablo Di Liscia.
Gabriela era docente de inglés en las escuelas N°11 y N° 103 del humilde barrio Villa Fiorito de Lomas de Zamora, había creado su propia marca de ropa y amaba la decoración de interiores.
El 26 de febrero de 2018 a las 4 de la madrugada la maestra fallece a sus 46 años en el Hospital Santojianni después de luchar contra un cáncer de médula ósea y, fundamentalmente, contra la desidia del IOMA.
Sucede que, Gabriella esperó más de dos meses que la mutual bonaerense le autorice la medicación que necesitaba para detener el avance de su enfermedad, pero eso nunca ocurrió.
Por eso, este viernes familiares, amigos y docentes se movilizaron a las oficinas del IOMA en Lomas de Zamora para homenajear a Gabriela y para que nunca más se repita un caso similar.
“Marchamos para que haya memoria sobre lo que pasó, para que la gente no se olvide del tendal de muertos que dejó Vidal en el IOMA”, dijo a Diputados Bonaerenses su cuñada, Gabriela del Valle Fantín. El pedido de justicia que levantaron ayer en la localidad bonaerense se hace extensivo a los 23 afiliados muertos que se contabilizaron durante la gestión de Di Liscia.
Recientemente los familiares de víctimas le presentaron una carpeta con todos los casos al nuevo presidente de la mutual Homero Giles, para que tome cartas en el asunto. «La hacemos totalmente a Vidal por lo que pasó. Vamos a seguir hasta el final el juicio para que paguen los responsables aunque se trata de monstruos muy grandes”, agregó Fantín.
La que también habló Mónica, la hermana de la docente, quien explicó que la marcha tuvo como objetivo lograr que “esta gestión no haga lo mismo que la anterior y que mejoren el tema de las autorizaciones”.
“Reclamamos que se entreguen de inmediato las drogas para enfermos oncológicos, el pago rápido a los prestadores y una buena atención para los afiliados”, sostuvo. En este sentido, el colectivo de familiares de víctimas del IOMA le pone la vara alta a la nueva gestión de Giles, que recién da sus primeros pasos, para nunca más haya una Gabriela Ciuffarella.
