La muerte de un adolescente de 16 años en la bajada del Acceso Sudeste, a la altura de Villa Azul, entre Quilmes y Avellaneda sigue sumando capítulos inquietantes. Mientras la familia asegura que fue un caso de “inseguridad”, la Justicia y la Policía investigan un trasfondo más oscuro: el menor asesinado había sido acusado de participar en un robo a mano armada y ahora apareció una imagen en redes sociales donde se lo ve con un arma de fuego a bordo de una moto que habría sido sustraída poco antes de su muerte.
La foto —que fue difundida por perfiles anónimos y ya está en manos de los investigadores— muestra al adolescente con un revólver, posando arriba de una motocicleta. ¿La misma que había sido denunciada como robada el 6 de abril por un vecino?.
Según la denuncia, el hombre fue interceptado por tres delincuentes armados en el Acceso Sudeste, quienes lo intimidaron con armas, le sustrajeron el celular y la moto, y luego huyeron en dirección a Villa Azul. En ese mismo barrio, horas después, se registró la muerte del joven ahora vinculado al hecho.

Sospechas, testimonios y una foto reveladora
Las fuentes policiales confirmaron a Infosur que los otros dos jóvenes que acompañaban al menor asesinado ya declararon ante la fiscalía y fueron identificados como parte del robo. La aparición de la fotografía complica aún más la situación: la Policía ahora investiga si la imagen fue tomada minutos antes del crimen y si el menor estaba escapando cuando recibió el disparo fatal.
El caos que siguió: peaje clandestino y un niño con un cuchillo
La muerte del adolescente derivó en un piquete que paralizó el Acceso Sudeste durante horas. Familiares y allegados cortaron el tránsito y comenzaron a pedir dinero a los automovilistas con el argumento de que necesitaban ayuda para el sepelio. “Transferencia aceptamos”, dijo una mujer ante las cámaras.
La situación se tornó aún más violenta cuando un niño de no más de 10 años intentó atacar a un policía con un cuchillo, mientras su madre forcejeaba con los uniformados. Todo quedó registrado por la televisión.
La madre del joven insiste: «Lo mataron narcos paraguayos»
Cinthia Herrera, madre del joven asesinado, declaró en medios nacionales que su hijo no estaba armado y que fue ejecutado por “narcos paraguayos” de Villa Itatí. “Hay una cámara que muestra cómo él sale herido y cae en la calle. No tenía armas”, afirmó.
Sin embargo, los elementos que se suman a la causa —la denuncia del robo, las declaraciones de sus cómplices y la foto con un arma— ponen en duda la versión familiar.