Hablar varios idiomas es más que un punto importante en el currículum vitae o práctico cuando estás en el extranjero. Aprender un idioma extranjero aumenta la cognición de los estudiantes, mejora sus procesos de toma de decisiones y, por último pero no menos importante, sus habilidades en el idioma nativo.
Además, aprender otro idioma también significa aprender a comprender mejor una cultura extranjera. Al viajar, queda claro que cada país es diferente en cada detalle.
Aprender sobre habilidades interculturales
En algunas culturas, las personas gesticulan perezosamente con las manos cuando conversan con amigos, mientras que otros en otros países se comunican con sonrisas sobre cosas que mueven al mundo. Estos son algunos de los puntos que llaman la atención de los estudiantes europeos cuando aprenden en escuelas como Expanish escuela de español sobre la cultura sudamericana.
Conocer la cultura local mientras se estudia un idioma permite a los estudiantes adaptarse a las circunstancias. Si no entiendes la cultura extranjera, los locales pueden sentirse insultados con solo el más mínimo gesto o expresiones faciales.
Comprender una cultura diferente también impresiona al empleador y ofrece la oportunidad de trabajar con clientes extranjeros si se utiliza el lenguaje corporal correcto para el idioma aprendido. ¿Pero cuáles son los beneficios personales si decides aprender un idioma extranjero?
Tomar decisiones más sabias
La comunicación en un idioma extranjero mejora la funcionalidad del cerebro al promover el reconocimiento general y la comprensión de los hechos a través de la comunicación en otro sistema lingüístico.
Esta habilidad también mejora otras habilidades para resolver problemas. Por ejemplo, los estudiantes que aprenden un idioma extranjero tienden a obtener mejores resultados en los exámenes estandarizados que sus compañeros que solo hablan uno.
Otra ventaja es la mejora de la capacidad de toma de decisiones. Según un estudio de la Universidad de Chicago, las personas multilingües tienden a tomar decisiones informadas. Aquellos que usan diferentes idiomas a menudo reconocen diferencias matizadas e implicaciones sutiles, porque esta ambigüedad influye en el juicio.
Las personas multilingües a menudo tienen más confianza en su toma de decisiones porque pueden comparar y analizar subconscientemente criterios en dos sistemas de lenguaje.
La lengua extranjera promueve habilidades multitasking y de percepción
En términos de expresión oral, escritura y estructura, las personas multilingües de todas las edades pueden cambiar hábilmente y sin problemas entre los sistemas lingüísticos.
De acuerdo con un estudio realizado por la Universidad Estatal de Pensilvania, quienes hacen malabarismos con el lenguaje son «buenos multitasking» porque pueden cambiar fácilmente entre diferentes funciones cerebrales.
En un estudio, los participantes utilizaron un simulador de conducción mientras realizaban otras tareas que los distraían. El estudio encontró que las personas que hablan más de un idioma cometen menos errores en general.
Otro estudio realizado por la Universidad Española Pompeu Fabra ha demostrado que las personas multilingües pueden observar mejor sus alrededores. Se enfocan mejor en la información relevante y descuidan lo irrelevante. También puede reconocer fácilmente hechos engañosos.
Un ejercicio para el cerebro
Los educadores a menudo comparan el cerebro con un músculo que siempre debe usarse. Aprender un idioma implica memorizar reglas y vocabulario, lo que ayuda a entrenar este «músculo» mental. El ejercicio mejora la memoria general, por lo que las personas multilingües pueden recordar listas o secuencias mejor.
Los estudios demuestran que los nombres y las direcciones son mejor recordados. Los «multilingües» más antiguos deberían poder defenderse por más tiempo contra el Alzheimer o la demencia.
Se han realizado varios estudios sobre este tema. Para los adultos sin habilidades lingüísticas, la edad promedio de los primeros signos de demencia es de 71,4 años. Para los adultos que hablan dos o más idiomas, la edad promedio es de 75.5 años.
Los estudios consideraron factores como el logro educativo, el ingreso, el género y la salud física, pero los resultados fueron consistentes en todos los factores.
Beneficios en la lengua nativa
Aprender un idioma extranjero se centra en los componentes básicos del lenguaje: la gramática, la conjugación y la estructura de las oraciones. De este modo, los estudiantes se benefician porque aprenden cómo se estructura su propio idioma y qué reglas sigue.
Sobre esta base, pueden adquirir habilidades adicionales como oradores, editores o escritores. La comprensión del habla también entrena al oído a medida que los alumnos aprenden a distinguir el significado de palabras y sonidos desconocidos.
